Aunque no es una novedad, doña Letizia ha vuelto a decantarse por piezas del joyero real con el que conseguir un acabado deslumbrante para su imagen en el tradicional concierto previo a la entrega de los Premios Princesa de Asturias. Una decisión con la que ha conseguido realzar su total look en negro, protagonizado por un nuevo vestido que sorprendentemente no firmaba Felipe Varela, salones destalonados de CH Carolina Herrera y cartera de mano de Magrit. Se tratan de piezas con historia que han pasado de generación en generación y que también las llevó en su día la reina doña Sofía. Denominadas joyas de pasar, sus pendientes y brazaletes pertenecieron a la reina Victoria Eugenia.
Para la ocasión, la reina Letizia recupera del joyero real más histórico piezas que pertenecen a las denominadas joyas de pasar. En su muñeca izquierda, luce las denominadas pulseras gemelas de brillantes. Se trata de unas creaciones que, como adelantamos, pertenecieron a la reina Victoria Eugenia y que, curiosamente, también las llevó en este mismo acto en 2017. Sin embargo, hace un año, decidió llevarlas separadas en ambas muñecas, en lugar de juntarlas.
También de la esposa de Alfonso XIII son los pendientes que muestra doña Letizia en esta ocasión. También los llevó la infanta Cristina en su boda con Iñaki Urdangarin. Se trata de dos piezas de diamantes con talla orla montados en garra.
No es la primera vez que decide mostrar estas piezas del joyero real, y que figuran como regalo de bodas de Alfonso XIII a la reina Victoria Eugenia. De hecho, no faltaron en su maleta de viaje a Reino Unido en el verano de 2017. Sin embargo, en aquella ocasión, llevó en diferentes looks los pendientes y los brazaletes. Por otro lado, por ejemplo, sí que decidió conjugar ambas creaciones en un mismo estilismo en febrero de 2017 durante una cena de gala ofrecida en el Palacio Real con motivo de la visita del Presidente de la República de Argentina a Madrid. En aquella ocasión, también apostó por estas joyas para realzar un total look en negro.
