7 claves fundamentales para vivir 100 años y vivirlos bien
Un experto en medicina antienvejecimiento nos explica qué comer, qué ejercicios hacer o qué otros factores influyen en la longevidad
El envejecimiento es un proceso biológico inevitable que afecta a todos los seres vivos, pero ¿podemos hacer algo para retrasarlo? Existe una serie de alteraciones que actúan sobre nuestros sistemas metabólicos, hormonales y neurotransmisores, moléculas complejas que finalmente conducen a la obsolescencia biológica. Sin embargo, a lo largo de la historia, hemos sido testigos de un aumento significativo en la esperanza de vida, lo que nos lleva a preguntarnos si es posible prolongar nuestra juventud y calidad de vida. Hasta finales del siglo XIX, la esperanza de vida en España era de 40 a 45 años, pero en la actualidad, llega a los 90 años.
En este sentido, la longevidad ha sido uno de los principales logros de la medicina moderna. Pero, ¿cómo hemos alcanzado esta expectativa de vida y qué podemos hacer para extenderla aún más? El Dr. Vicente Mera, responsable de Medicina Interna y Anti-envejecimiento en SHA Wellness Clinic menciona que estamos buscando la calidad de vida, más que simplemente la cantidad de años vividos. La clave está en frenar el envejecimiento y, para lograrlo, se deben seguir siete aspectos clave que a continuación nos explica este experto en antiaging. Como él nos dice, se trata de una especie de 'manual de instrucciones' que nos permitirá vivir 100 años y vivirlos bien.
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Comer menos
No hay que comer en exceso para vivir 100 años. Como comenta este especialista en medicina antienvejecimiento, cuanto más comamos, más errores de alimentación podemos cometer y dañar nuestro organismo. Por eso, aboga por una dieta adecuada a nuestras necesidades reales, según nuestra actividad y requerimientos nutricionales.
Como explica, hay que apostar por los alimentos ricos en antioxidantes, vitaminas y minerales, ya que son fundamentales para mantener un buen estado de salud. Nos recuerda que en la dieta mediterránea están incluidos todos los alimentos que necesitamos, fundamentalmente, frutas, verduras, hortalizas, legumbres, cereales integrales y semillas. También insiste en incluir aquellos cuyas propiedades pueden alargar la vida. En el caso de nuestra dieta, el aceite de oliva, considerado un superalimento.
Otro de los superalimentos que el Dr. Mera destaca el miso, un producto japonés con propiedades extraordinarias que no solo proporciona energía, sino que también suprime el apetito, lo que ayuda a mantener un peso corporal adecuado.
Para mantener una alimentación saludable, es importante evitar alimentos procesados y ricos en grasas saturadas y azúcares.
Ejercicio
Mantenerse activo físicamente es fundamental para prolongar la vida y retrasar el envejecimiento. El ejercicio cardiovascular, como caminar, correr, nadar o practicar deportes, fortalece el corazón y mejora la circulación sanguínea. Además, ayuda a controlar el peso corporal y disminuir el riesgo de enfermedades cardiovasculares y metabólicas.
Por otro lado, el ejercicio de fuerza, como levantar pesas o hacer ejercicios de resistencia, ayuda a mantener la masa muscular y la densidad ósea, lo que es especialmente importante a medida que envejecemos y perdemos masa muscular y densidad ósea.
Combinar ejercicio cardiovascular con ejercicios de fuerza y flexibilidad, como el pilates o estiramientos, es clave para mantener un cuerpo fuerte y ágil.
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Gestión de emociones
El estrés es un factor que puede afectar negativamente nuestra salud y acelerar el envejecimiento. Es importante aprender a gestionar el estrés de manera adecuada. Para ello, existen diversas técnicas que pueden ser de gran ayuda, como la respiración consciente, la meditación, el mindfulness y la práctica de actividades placenteras, como el baile. El Dr. Mera insiste, de hecho, que el baile no solo relaja, también da alegría, promueve la socialización y es un excelente ejercicio para vivir más y mejor.
Estas técnicas pueden reducir la ansiedad, mejorar el estado de ánimo y fomentar la relajación, lo que contribuye a mantener un equilibrio emocional y una mente más tranquila y en paz.
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Dormir bien
El sueño es un pilar fundamental para la salud y el bienestar, así como para retrasar el envejecimiento. Durante el sueño, el cuerpo se repara y se regenera, y el cerebro procesa la información del día.
Dormir de 40 a 50 horas a la semana es esencial para mantener un equilibrio físico y mental. Durante el sueño profundo, se liberan hormonas que favorecen la reparación celular y la regeneración de tejidos, lo que contribuye a una piel más saludable y un cuerpo más rejuvenecido.
Por otro lado, el sueño insuficiente puede afectar el estado de ánimo, la concentración, el rendimiento cognitivo y el sistema inmunológico, aumentando el riesgo de enfermedades crónicas y acelerando el envejecimiento.
Es importante mantener una rutina de sueño adecuada, evitar el consumo de cafeína y dispositivos electrónicos antes de acostarse y crear un ambiente propicio para un descanso reparador.
Cuidar la microbiota
La importancia de una microbiota equilibrada en nuestro segundo cerebro (el intestino) es cada vez más reconocida. La microbiota es una comunidad de microorganismos que viven en nuestro tracto gastrointestinal y juega un papel crucial en diversos procesos fisiológicos.
Una dieta rica en fibra, alimentos fermentados y probióticos es esencial para mantener una microbiota saludable. Estos alimentos promueven la diversidad y el equilibrio de bacterias beneficiosas en el intestino, lo que mejora la digestión, fortalece el sistema inmunológico y contribuye a una mejor salud mental. También es importante evitar el consumo excesivo de alimentos procesados y grasas saturadas, que pueden alterar la microbiota y conducir a problemas de salud.
Mejorar la capacidad depurativa del cuerpo y hacerse chequeos médicos
El cuerpo está expuesto a diversas toxinas presentes en el medio ambiente, el tabaco, el alcohol y algunos alimentos procesados. Para retrasar el envejecimiento, es esencial evitar la exposición a estas sustancias y mejorar la capacidad depurativa del organismo.
El hígado, los riñones y otros órganos desempeñan un papel crucial en la eliminación de toxinas del cuerpo. Para mantener su correcto funcionamiento, se debe seguir una dieta equilibrada y evitar el consumo excesivo de alcohol y tabaco, que pueden afectar negativamente estos órganos.
Además, realizar chequeos médicos periódicos puede ayudar a detectar posibles problemas, algunos generados por las toxinas a los que está sometido nuestro organismo, y abordarlos a tiempo.
Equilibrar las hormonas
A medida que envejecemos, nuestros niveles hormonales cambian. Las hormonas son responsables de regular una gran cantidad de procesos en nuestro cuerpo, como el metabolismo, el estado de ánimo, la libido y el sueño, entre otros. Un desequilibrio hormonal puede afectar negativamente nuestra salud y acelerar el envejecimiento.
Es importante realizar un diagnóstico adecuado con un profesional especializado en medicina interna u endocrinología para equilibrar las hormonas y mejorar nuestra salud. Los tratamientos hormonales pueden ser una opción en casos específicos, pero siempre deben ser supervisados por un médico.
En conclusión, buscar el equilibrio
Como vemos, aunque el envejecimiento es inevitable, podemos influir en cómo lo experimentamos y retrasar sus efectos a través de hábitos saludables. Siguiendo estas siete claves, es posible mejorar la calidad y esperanza de vida, disfrutando de una vejez más activa y plena. Si bien alcanzar los 100 años puede parecer un reto para nuestra generación, es probable que las futuras generaciones lo logren gracias a la aplicación de estos principios y los avances médicos. La clave está en mantener un equilibrio entre cuerpo, mente y emociones para disfrutar al máximo de cada etapa de la vida.
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