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Tras haber superado la COVID-19, aunque la hayamos pasado de una forma leve, es posible que sigamos cansadas, con la sensación de estar sin fuerzas. La dieta, los buenos hábitos y tomar algunos suplementos alimenticios pueden ayudarte a recuperar la vitalidad. 

Como nos explica Mar Santamaría, farmacéutica de PromoFarma, esta sensación de estar aún convaleciente es muy típica en las infecciones respiratorias. "Tanto esta como otras dolencias como los resfriados o la gripe conllevan un periodo de convalecencia". Así, tras la COVID-19, explica Mar Santamaría, “lo que vemos con frecuencia es cansancio residual, cuya intensidad varía en función de cada persona. Esta “bajada de energía ocurre como consecuencia del proceso inflamatorio de la infección viral y de la propia respuesta y activación del sistema inmune, que ha hecho bien su trabajo al combatir el virus, pero necesitará reponerse de ello”.

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No es lo mismo que la covid persistente 

La farmacéutica recuerda que estos síntomas de cansancio, que generalmente duran poco tiempo, no se pueden confundir con las secuelas propias de la covid persistente. Este es un problema que sufren algunas personas que, tras pasar la COVID-19, aunque sea de forma leve, continúan con síntomas que no cesan durante meses. Por eso, señala que no nos preocupemos por este periodo de convalecencia, siempre que no tengamos factores de riesgo que requieran supervisión médica o si este 'bajón' dura más de dos semanas.

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Mucha hidratación, dieta sana y descanso 

Esta es la mejor manera de pasar este periodo de convalecencia tras haber sufrido una covid leve. De hecho, pueden ayudar a acelerar la recuperación. La dieta debe ser variada y equilibrada, abundante en alimentos frescos, sin ultraprocesados y las cocciones deben ser sencillas. La hidratación también es esencial, ya que deben reponerse los líquidos. Para ello, debemos incrementar la cantidad de agua que bebamos. También podemos incluir caldos muy nutritivos. En cuanto al descanso, no escatimes horas de sueño y vuelve a la actividad de forma paulatina.

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Los suplementos alimenticios que te ayudan 

Además de una buena dieta, podemos recurrir a suplementos alimenticios de venta en farmacias y herbolarios que nos pueden dar ese plus de energía que necesitamos. En este sentido, Santamaría nos recomienda aquellos que aporten nutrientes y micronutrientes de refuerzo a los procesos metabólicos generales y al sistema inmune. Así, señala que podemos tomar un complemento que incluya uno o varios de estos ingredientes. Eso sí, nos recomienda consultar con un profesional de la salud. 

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Jalea real 

Se compone de aminoácidos, inmunoglobulinas o vitaminas E y A, así como de la proteína apalbúmina, vinculada a la inmunidad. “Estos componentes son los responsables de su actividad sobre la proliferación de linfocitos T, lo que permite a su vez la proliferación de las células inmunológicas y, por lo tanto, del sistema inmune”, explica Maria Victoria Lara, farmacéutica del Dpto Científico de Arkopharma. Además, algunos ensayos de jalea real con animales han podido dar las primeras evidencias sobre la mejora de parámetros del sistema inmune tras la administración de ciertas vacunas.

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Acerola 

La Acerola (Malphigia glabra), también llamada cereza de las Antillas, es la fuente natural más rica en ácido ascórbico o vitamina C. Cada 100 g de pulpa de Acerola encierran hasta 5.000 mg de vitamina C, es decir, hasta 100 veces más que una naranja, cuyo contenido medio es de 50 mg por cada 100 g de pulpa.  Otros alimentos que contienen vitamina C en cantidades importantes son (por cada 100 g de alimento): Kiwi 100 mg, pimiento rojo 139 mg, fresa 70 mg, brócoli 110 mg, explican desde Arkopharma. 

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Hongos medicinales 

Se conocen por sus propiedades inmunomoduladoras (de soporte al sistema inmune) y también pueden ser un buen recurso como complemento de la dieta en época de baja energía. Por ejemplo, el reishi (Ganoderma lucidum) aporta betaglucanos y otras sustancias de interés (vitaminas, ergosterol) de apoyo al sistema inmune. Además, como alternativa a tomar un suplemento, podemos incorporar a nuestra dieta el consumo de setas como el shiitake, los champiñones u otras de cultivo próximo, que son también fuente de betaglucanos.

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Aromateria 

También te puede ayudar a sentirte mucho mejor. Para Mar Santamaría, es el complemento ideal que nos puede dar un empujoncito para recuperar la vitalidad si estamos en periodo de convalecencia tras la covid leve. La farmacéutica nos recomienda algunos aromas como la esencia de limón (Citrus limon), que aporta vitalidad, favorece la concentración y actúa como antiséptico ambiental; y el aceite esencial de ravintsara (Cinnamomum camphora), puesto que es tonificante, antiséptico ambiental y apoya a las defensas. Lo más habitual es utilizar una sinergia o combinación específica de aceites esenciales.

Mar Santamaría, de PromoFarma, concluye recordando que, aunque la aromaterapia sea natural, no es inocua, y que "algunos aceites esenciales pueden estar contraindicados durante el embarazo, en bebés o personas asmáticas, por lo que deberemos informarnos bien de su uso seguro en situaciones especiales".

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