Utilizar un gas como tratamiento médico. Aunque tal vez pueda sonarte a ciencia ficción, lo cierto es que la ozonoterapia está ganando terreno como alternativa terapéutica en diversas patologías. Desde dolores crónicos hasta infecciones persistentes, este método utiliza ozono para estimular la oxigenación, reducir la inflamación y reforzar el sistema inmunológico. Pero ¿en qué casos está indicada? ¿Puede tener alguna contraindicación? Sobre todo ello hemos hablado con el doctor Manuel Maynar, Director del Servicio de Diagnóstico y Terapéutica Endoluminal/ Endovascular de los Hospitales Universitarios Hospiten Rambla y Sur
¿En qué consiste el uso de la ozonoterapia como alternativa de tratamiento médico?
La ozonoterapia es una técnica médica que utiliza el ozono, un gas compuesto por tres átomos de oxígeno (O3), con fines terapéuticos. Esta terapia se basa en las propiedades antimicrobianas, antiinflamatorias, aumento de oxigenación tisular, y antioxidantes del ozono, y se utiliza en diversas áreas de la medicina para tratar diferentes condiciones de salud.
¿Qué evidencia científica existe sobre la eficacia de la ozonoterapia?
A día de hoy, algunas investigaciones sugieren que la ozonoterapia podría tener efectos antimicrobianos, antiinflamatorios y mejorar la oxigenación tisular. Se ha explorado en áreas como heridas crónicas, osteoartritis, y diversas patologías infecciosas. Sin embargo, se necesita más investigación de alta calidad para determinar su posible utilidad clínica. Es recomendable consultar a profesionales de la salud antes de optar por esta terapia.
"A día de hoy, algunas investigaciones sugieren que la ozonoterapia podría tener efectos antimicrobianos, antiinflamatorios y mejorar la oxigenación tisular"
¿Para qué enfermedades o condiciones médicas está indicada ésta terapia?
La ozonoterapia es un tratamiento que utiliza ozono para promover efectos terapéuticos en diversas condiciones de salud. Se ha empleado en el manejo de varias enfermedades, solo o como tratamiento complementario:
- Enfermedades infecciosas: ayuda en infecciones crónicas, como herpes zóster o infecciones respiratorias, debido a sus posibles propiedades antimicrobianas y estimulantes del sistema inmunológico.
- Dolores crónicos y artrosis: en patologías como artrosis artritis, hernias discales y otras enfermedades musculoesqueléticas, para reducir inflamación y dolor.
- Problemas vasculares: como heridas crónicas, el pie diabético, úlceras y isquemias, promoviendo la oxigenación de tejidos.
- Enfermedades autoinmunes y inflamatorias: algunas investigaciones sugieren beneficios en condiciones como la esclerosis múltiple, fibromialgia o la artritis reumatoide.
¿Cuáles son sus principales beneficios?
El ozono médico se utiliza con fines terapéuticos, para mejorar el funcionamiento de órganos, tejidos, tratando múltiples enfermedades. Tiene propiedades antimicrobianas, estimula el sistema inmunológico, mejora la circulación, tiene propiedades antioxidantes y alivia el dolor y la inflamación.
"Algunas personas pueden experimentar reacciones alérgicas, que van desde erupciones cutáneas hasta dificultad para respirar"
¿Cuáles son los posibles efectos secundarios o riesgos asociados de su uso?
El ozono tiene pocos efectos secundarios. Puede producirse dolor o molestias en el sitio de administración y puede presentarse inflamación local tras la aplicación, que generalmente desaparece en poco tiempo.
Las reacciones alérgicas son poco frecuentes, algunas personas pueden experimentar reacciones alérgicas, que van desde erupciones cutáneas hasta dificultad para respirar. En algunos casos, puede afectar el metabolismo y niveles de glucosa en sangre, especialmente en pacientes con diabetes. Por tal motivo la ozonoterapia debe ser realizada únicamente por profesionales entrenados y en entornos adecuados.
¿Hay personas para la que la ozonoterapia esté contraindicada?
Sí, existen algunas situaciones en las que su uso está restringido, en concreto cuando la persona presenta favismo, hipertiroidismo, discrasias sanguíneas severas, intoxicación alcohólica aguda, infarto cardiaco y/o embarazo. También, para profesionales del deporte, esta técnica puede ser considerada dopante.
¿Cómo se administra exactamente el ozono en este tratamiento?
La ozonoterapia se aplica de varias maneras dependiendo de la condición que se esté tratando.
- Inyección directa: El ozono se puede inyectar directamente en el tejido muscular, articular o en espacios intervertebrales para tratar dolores musculares o articulares, como en el caso de la artritis.
- Autohemoterapia: Este método implica la extracción de una pequeña cantidad de sangre del paciente, que se mezcla con ozono y luego se reinfunde en la vena del paciente. Se utiliza con frecuencia para fortalecer el sistema inmunológico.
- Insuflación rectal: En este método, el ozono se introduce a través del recto y es comúnmente utilizado para problemas intestinales o para desintoxicación.
- Bolsa de ozono: Para condiciones de la piel como el pie diabético, el ozono se aplica sobre la piel encapsulando la parte del cuerpo afectada en una bolsa o utilizando saunas de ozono.
Es importante destacar que la ozonoterapia debe ser aplicada por profesionales capacitados, ya que la administración incorrecta de ozono puede tener efectos negativos en la salud. Además, su eficacia y seguridad pueden variar, así que es importante consultar con un médico antes de someterse a este tipo de tratamiento.
¿Cuántas sesiones suelen ser necesarias y con qué frecuencia?
Cada patología se estudia con rigor y, según la vía de administración, se recomienda un mínimo de tres sesiones o, en caso de uso local, hasta la regeneración total de la úlcera periférica.