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Has vuelto a la rutina con unos kilos de más y te estás planteando realizar una dieta exprés, de plazos cortos, para tratar de volver a reconciliarte con la báscula. Te anticipamos que es una mala elección: este tipo de planes suelen acabar en fracaso. “Las dietas que se realizan por cortos periodos de tiempo suelen ser muy radicales y pueden conllevar una pérdida de peso importante, esa pérdida de peso desencadena mecanismos normales en el cuerpo que llevan a recuperar el peso perdido, por tanto, si luego no hay un plan de acción, la recuperación del peso perdido es la norma”, nos cuenta la doctora Ana de Hollanda, coordinadora del Área de Obesidad de la Sociedad Española de Endocrinología y Nutrición (SEEN).
Partiendo de esta idea, nos preguntamos por qué piensa que, entonces, año tras año, vuelven a la palestra y, es más, muchas personas las siguen. “La siguen por desinformación, porque el mercado de las dietas quiere sacar provecho. Todos queremos vernos bien, y en ese contexto juegan a la oportunidad de querer vender que necesitamos un tratamiento urgente”, comenta la especialista.
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¿Cuáles son los grandes errores de estas dietas?
Tal y como nos explica la médico especialista en Endocrinología y Nutrición, los grandes errores de este tipo de dieta están en la planificación a largo plazo, por tanto, en el concepto mismo de ser un proceso transitorio. “Otras veces el error puede estar en la composición de la dieta, no son recomendables las dietas que restrinjan un grupo en concreto de alimentos”, apunta.
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El temido ‘efecto rebote’
Sin duda, en todo proceso de pérdida de peso puede aparecer un efecto rebote, que en realidad es un proceso normal del cuerpo que quiere volver al peso anterior. “En concreto, la dietas que inducen mayor pérdida de peso en un tiempo menor, si no hay una planificación adecuada, el efecto rebote está asegurado”, comenta la especialista.
Dietas personalizadas
Lo que está fuera de toda duda es que es importante que las dietas sean siempre personalizadas y adaptadas a cada uno. “Es muy importante, no solo a las enfermedades que una persona padezca, a la composición de macronutrientes (que son los carbohidratos, grasas y proteínas), sino también a las preferencias de alimentos, a los horarios de trabajo, sueño, ejercicio físico, etc. Es clave para la adherencia al plan de alimentación, sin duda”, nos cuenta la doctora.
Toca, por lo tanto, cambiar de hábitos, un aspecto clave. Pero cualquier cambio requiere de un esfuerzo y hay a personas a las que les cuesta mucho abandonar su zona de confort, ¿qué les diría la especialista? “Cambiar de hábitos es difícil, es un proceso que se tiene que hacer poco a poco, de forma progresiva, un pequeño cambio por vez al final puede dar grandes resultados. No focalizarse únicamente en la pérdida de peso, comer más frutas y verduras, por ejemplo, puede ser un objetivo inicial muy importante, que aportará beneficios en la salud antes de que veamos una pérdida de peso”, comenta Ana de Hollanda.
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Alternativas a estas dietas
Estas dietas son típicas antes de una boda o acontecimiento importante para nosotros, ¿qué opciones recomendaría en su lugar? “Recomendamos que lo tomemos con calma, cada día es un buen día para iniciar un cambio a largo plazo, ponernos en manos de un profesional, el médico de cabecera sabrá guiarnos, junto con una dietista. Informarse sobre un estilo de vida saludable es el primer paso”, concluye.
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