Ya no parece haber marcha atrás. Cada vez son más los rostros conocidos que no dudan en compartir, sin reparos, sin miedo al estigma, sus problemas de salud mental. Se rompen los tabúes y hemos visto cómo Selena Gomez, Mai Meneses o Bella Hadid no han dudado en compartirlos con el objetivo de darles visibilidad. El último ejemplo ha sido el de la cantante Gloria Estefan, que reconocía en su reciente participación en la 2023 Simmons Leadership Conference cómo ha necesitado hacer terapia para superar el duelo tras el fallecimiento de su madre, en junio de 2017.
Y es que, aunque ha experimentado su parte de dolor y trauma, no pensó que necesitaba terapia hasta ese momento en el que murió su madre, Gloria Fajardo. "Entendí la terapia y su valor. A pesar de que pasé por cosas muy difíciles en mi vida, no sentí que necesitara terapia en ese momento", dijo la cantante. "La necesité después de perder a mi madre".
Y valora positivamente haber tomado esa decisión, pues reconoce que la terapia ha funcionado en los últimos años. Toda una llamada de atención, especialmente en nuestra sociedad actual. "Creo que es muy importante hoy en día, ya que veo que la ansiedad está creciendo en nuestra juventud, que nos centremos en nuestra salud mental porque hay mucha información, mucha negatividad, muchas cosas difíciles. Tenemos que aprender a desconectar", comentó la artista, que admitió que la meditación también ha sido útil para ella.
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Afrontar el duelo
La cantante de Mi tierra recurrió para superar un momento complicado, el del duelo, una experiencia, sin duda, dolorosa. “Es una respuesta natural a la pérdida y es una parte importante del proceso de adaptación y de recuperación emocional. Desde el punto de vista psicológico, el duelo es una experiencia compleja que involucra varios procesos emocionales, cognitivos y conductuales”, comenta Pilar Guerra Escudero, psicóloga clínica y coach ejecutivo, que explica que, en primer lugar, es importante reconocer que el duelo es una experiencia única y personal, y que cada persona lo vive de manera diferente. “No hay un proceso de duelo ‘correcto’ o ‘normal’. Las personas pueden experimentar una amplia gama de emociones, como tristeza, ira, culpa, ansiedad, desesperación y soledad. Estas emociones pueden ser intensas y pueden cambiar de un momento a otro”, nos detalla.
Por eso, considera que es importante permitirse sentir todas estas emociones y no tratar de reprimirlas o evitarlas. “Negar o reprimir las emociones puede prolongar el proceso de duelo y dificultar la recuperación emocional. En cambio, es importante permitirse llorar, hablar con amigos y familiares, y buscar apoyo emocional”, nos cuenta.
Otro aspecto importante del proceso de duelo es el ajuste a una nueva realidad. Después de la pérdida de un ser querido, las personas pueden sentir que su vida ha perdido el sentido o que su identidad ha cambiado. Es importante reconocer que la vida nunca volverá a ser la misma, pero que es posible encontrar un nuevo sentido de normalidad y propósito. “En este sentido, es importante establecer nuevas rutinas y actividades que ayuden a mantenerse ocupado y distraído”, sugiere.
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Consejos para sobrellevar el duelo
El duelo puede ser un proceso largo y difícil, pero hay formas de sobrellevarlo.
- Permitirnos sentir: El duelo es un proceso emocional y es importante que nos permitamos sentir todas las emociones que vienen con él. No reprimir las emociones, llorar si lo necesitamos, hablar con alguien de confianza, escribir nuestros pensamientos y sentimientos. En definitiva, permitirnos sentir es una parte importante del proceso de sanación.
- Buscar apoyo: No tenemos que pasar por el duelo a solas. Buscar a amigos, familiares o un terapeuta para hablar sobre nuestras emociones y recibir apoyo emocional. Otra opción es unirse a un grupo de apoyo para personas en duelo.
- El autocuidado: El duelo puede ser agotador, por lo que es importante cuidar de nuestro bienestar físico y emocional. Es necesario tratar de dormir lo suficiente, comer bien, hacer ejercicio y buscar actividades que nos ayuden a relajarnos y a sentirnos bien.
- Aceptar que el proceso de duelo es único para cada persona: No hay un tiempo definido para superar el duelo y no hay una forma "correcta" de hacerlo. Aceptemos que nuestro proceso de duelo será único y darnos el tiempo que necesitemos.
- Buscar la ayuda de un profesional. Si nos sentimos atrapados, un psicólogo puede ayudarnos a procesar nuestras emociones y encontrar formas de avanzar.
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¿Conviene buscar ayuda en terapia?
“Los psicólogos podemos proporcionar una guía y herramientas útiles para ayudar a las personas a atravesar el proceso de duelo. Los terapeutas podemos ayudar a las personas a entender y procesar las emociones y sentimientos, lo que puede ser difícil de hacer solos. También a desarrollar habilidades para enfrentar el dolor y la pérdida, y a encontrar formas de seguir adelante con nuestras vidas”, explica Pilar Guerra, que insiste en que es importante personalizar el tratamiento y adaptarlo a las necesidades y circunstancias individuales de cada persona.
“Además, los profesionales podemos ofrecer un espacio seguro y de apoyo para que las personas hablen abiertamente sobre sus sentimientos y preocupaciones sin temor al juicio o la crítica. Al no tener un plazo definido, el duelo puede ser un proceso largo y doloroso. Por eso, buscar ayuda puede ser especialmente importante en los momentos en que la tristeza y la desesperación parecen interminables. En resumen, la pérdida de un ser querido puede ser una experiencia abrumadora y difícil de manejar que en muchas ocasiones requiere de ayuda especializada”, concluye la experta.
