Pelvis congelada: cuando la endometriosis es extrema

Te explicamos cuándo se puede producir esta condición que puede afectar a la fertilidad de la mujer, así como hacia dónde se encamina la investigación para tratarla

Por Nuria Safont

La endometriosis es una enfermedad que afecta a millones de mujeres en todo el mundo. Produce dolor intenso y también infertilidad. A pesar de las campañas de concienciación, sigue siendo una gran desconocida y se estima que 175 millones de mujeres viven con este diagnóstico. Los expertos advierten de que si bien sus síntomas suelen asociarse con la menstruación, la regla no tiene por qué doler, por lo que es importante acudir a consulta ginecológica si se experimentan dolores. La endometriosis es una enfermedad que no debe ser ignorada y es importante buscar tratamiento temprano. Un tratamiento precoz puede evitar que se produzca otra situación: la pelvis congelada, "algo que puede suceder cuando no se trata la endometriosis y se llega a una proliferación de adherencias", explica Irene Aterido, sexóloga y experta en ciclo menstrual, colaboradora de INTIMINA.

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¿Qué es la endometriosis?

La endometriosis es una enfermedad en la que células similares al tejido del interior del útero se encuentran fuera de él. Una de las posibles causas que pueden provocar esta condición es la migración de células endometriales a través de los vasos sanguíneos o el sistema linfático, aunque no se sabe con certeza qué la provoca. 

La pelvis congelada, por su parte, se refiere al estado en el que las adherencias entre órganos pélvicos provocan que queden inmovilizados, y la endometriosis infiltrativa o profunda suele estar relacionada con este síndrome.

"Cuando el tejido endometrial invade varios órganos de la pelvis y forma cicatrices y adhesiones, puede alterar la anatomía y la funcionalidad normal de los órganos femeninos. "Esto es lo que se conoce como pelvis congelada. Esta condición se acompaña de dolor y puede afectar la función ginecológica, digestiva y urinaria", añade Isabel Vielsa, ginecóloga y directora médica de Clínicas Eva

Aunque la endometriosis es una causa frecuente de pelvis congelada, también puede ser causada por otras condiciones como cáncer, EIP, radioterapia o intervenciones quirúrgicas en la pelvis.

Es importante destacar que el tratamiento adecuado de la endometriosis profunda puede prevenir la aparición del síndrome adherencial o pelvis congelada.

Síntomas de la pelvis congelada

Los pacientes que sufren de pelvis congelada experimentan frecuentemente dolor intenso y a veces continuo, lo que suele requerir tratamiento quirúrgico mediante laparoscopia. Además, estos pacientes suelen requerir tratamiento médico y un manejo multidisciplinario adecuado en unidades de dolor.

Otros síntomas pueden ser estreñimiento, dolor durante la defecación y, a veces, urgencia miccional, provocada por la constricción de la vejiga y/o intestinos al formarse adherencias en los órganos.

En los casos en los que la pelvis congelada se debe a la endometriosis sin tratar, las mujeres llegan a sentir dolor al mantener relaciones sexuales, lo que se conoce como dispareunia, debido a las lesiones y alrededor de la zona vaginal o cervical.

¿Todas las endometriosis pueden acabar en pelvis congelada? 

"Si no se trata adecuadamente la inflamación subyacente a la endometriosis, adenomiosis y algunas otras afecciones, se puede llegar al punto de tener este síndrome adherencial o pelvis congelada", señala Aterido. 

La experta subraya que se trata de un riesgo especialmente asociado a la endometriosis rectovaginal (en los ligamentos útero-sacros) y en general a las endometriosis profundas, ya que los implantes de endometriosis se unen a las vísceras y a su vez pueden crear estas adherencias.

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Endometriosis, pelvis congelada e infertilidad

En general, podemos decir que se incrementa la dificultad de quedarse embarazada debido a que, para una concepción espontánea, las trompas deben poder moverse. Si la “pelvis congelada es debida a la adenomiosis, desde luego que se incrementa la dificultad de embarazo. El síndrome adherencial impide la movilidad tubárica per se, pero el componente anatómico no es el único a la hora de explicar la subfertilidad asociada a las endometriosis profundas. Interviene el sistema inmunológico y la inflamación, obstaculizando la implantación y provocando embarazos algo más complicados en algunas ocasiones para algunas mujeres con endometriosis", indica Irene Aterido.

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Tratamientos para la endometriosis y pelvis congelada 

En casos menos avanzados, se prescribe terapia hormonal, principalmente anticonceptivos hormonales, además de analgésicos. Estos tratamientos suelen ser efectivos para el manejo de la enfermedad y su uso es seguro. En casos más avanzados, puede ser necesaria la intervención quirúrgica. Sin embargo, se está tratando de avanzar en el tratamiento de estas dolencias. 

En los últimos años, se ha llegado a pocas conclusiones sobre nuevos tratamientos para la endometriosis. Sin embargo, se ha destacado un trabajo publicado en la revista Small, respaldado por los Institutos Nacionales de Salud de Estados Unidos, que muestra la utilidad de la hipertermia médica para esta enfermedad.

"La técnica, actualmente en fase experimental y en estudio con ratones, utiliza nanopartículas administradas mediante una inyección intravenosa. Estas nanopartículas buscan destruir el tejido invasivo mediante la generación de calor, a una temperatura de 46ºC, lo que hace innecesaria la cirugía y evita el tratamiento hormonal que no es recomendado para mujeres que quieren quedarse embarazadas pronto", explica la ginecóloga Isabel Vielsa.