Vitaminas, ¿qué cantidad es segura?

El doctor Eduardo Junco Anós repasa las posibles consecuencias de tomar más suplementos vitamínicos de los necesarios

Por hola.com

¿Son seguros los suplementos vitamínicos? ¿Qué pasa si se toman más vitaminas de las necesarias? ¿Dónde está el límite? Estas son inquietudes comunes estimuladas por noticias difundidas por los medios de comunicación, en las que, por ejemplo, se asocia la vitamina C con la aparición de piedras en el riñón, o se advierte del peligro de tomar vitamina A durante el embarazo. Pero, ¿cuánto es real y cuánto ficción?

Hay que tener en cuenta que la toma óptima de nutrientes varía según las características personales de cada individuo: peso, tamaño, actividades que realice, padecimiento de alguna enfermedad, estado general de salud, alimentación y dieta. En realidad, hay que tener en cuenta que cualquier nutriente es potencialmente tóxico si se toma por encima de un margen de seguridad. En 1990, un hombre falleció al beberse 10 litros de agua en dos horas. Por lo tanto la pregunta clave es: ¿cuánta cantidad más se necesita consumir de una sustancia que se toma normalmente, para alcanzar los niveles tóxicos?

La seguridad de las vitaminas
La conclusión general a la que se puede llegar del estudio de más de 100 trabajos de investigación publicados sobre las vitaminas es que las probabilidades de tener una reacción tóxica a los complementos vitamínicos, incluso con la dosis más elevada que hay disponible en las tiendas de nutrición, es extremadamente improbable. La única posibilidad de toxicidad existe si se ingieren muchas más tabletas de las recomendadas por el médico. Tiene que haber en realidad una intencionalidad clara para llegar a esa dosis tóxica.

Algunos estudios estadísticos son absolutamente reveladores en este sentido. Por ejemplo, un estudio realizado años atrás por parte de los Centros Locales de Control de Envenenamiento en Estados Unidos registró 1.182 muertes por fármacos, pero ninguna de ellas a consecuencia de un suplemento vitamínico.

En España, en el último año, de los miles de muertes que se producen a causa de los medicamentos, no existe ninguna muerte atribuida a una intoxicación vitamínica. En realidad, la muerte puede ser un límite demasiado radical para valorar la toxicidad y los efectos adversos de las vitaminas. Curiosamente, también en este sentido es difícil encontrar casos en los que se produzcan intoxicaciones a consecuencia del abuso de vitaminas. Es raro también el especialista en nutrición que se ha encontrado con algún caso de este tipo a lo largo de su carrera.