Reformar la cocina en 9 pasos: todo lo que has de saber para acertar

Afrontar la reforma total de una cocina no es tarea fácil. Son muchos los aspectos que hay que tener en cuenta, desde las instalaciones hasta la distribución del espacio, los materiales para los revestimientos, el mobiliario, etc. Si decides encargarte de controlar cómo van los trabajos, lo mejor será dejar a un lado los agobios y hacer un repaso de los pasos a seguir.

1. Define tus objetivos

Antes de comenzar la reforma es esencial saber exactamente qué quieres para tu nueva cocina. Piensa en cómo es tu cocina ahora y cómo te gustaría que fuese. Qué elementos echas en falta y cuáles te sobran. Definir tus necesidades es la forma de conseguir una cocina más funcional para ti.

Cuando tengas claras las directrices a seguir, puedes buscar inspiración en redes, catálogos online, centros especializados, revistas de interiorismo, etc. Es importante dedicar un tiempo suficiente a esta fase, ya que si tienes el objetivo claro desde el principio, todo será más rápido y el resultado será mejor.

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2. Plantea tu proyecto

Una vez tengas clara en tu mente la cocina que quieres conseguir, es hora de convertir esas ideas en un proyecto definido sobre el papel. Será un diseño personalizado para tu cocina, con medidas incluidas.

Ha llegado el momento de adaptar tus ideas, fruto de la inspiración, al espacio real de tu cocina. Y en este punto entra en juego la realidad: puede que tú quieras tener una isla de cocina, pero si no hay suficientes metros cuadrados para ponerla, lo mejor es desistir.

En este punto tienes que pensar si hay que redistribuir el espacio, cambiar instalaciones de agua o electricidad, etc. Ten en cuenta el 'triángulo de trabajo', que es el que se establece entre tres puntos clave: la zona de cocción, la zona de lavado y la zona de preparación. Gracias a este esquema, el trabajo en la cocina resulta más eficiente. Piensa en los obstáculos que tendrás que salvar y busca la forma de hacerlo: vigas, columnas, tuberías, etc.

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3. Decide el presupuesto

Valora todas las opciones disponibles y también el presupuesto con el que cuentas. En este punto es buena idea que te oriente un profesional de un establecimiento de cocinas. Es importante saber que el presupuesto determinará el tipo de revestimiento que puedes poner, o los muebles y sus accesorios, los elementos de almacenaje, etc. Decide el diseño, la gama de colores y los acabados.

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4. Elige el estilo para tu cocina

Si estás deseando reformar tu cocina porque está anticuada querrás renovar su estilo. Ahora es el momento de decidir las directrices estéticas que vas a seguir cuando tengas que decidir el estilo de los muebles y el resto de elementos.

Lo mejor es apostar por una cocina moderna, pero que presente un diseño neutro y atemporal que no pierda actualidad aunque pasen los años.

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6. Crea soluciones de almacenaje

Piensa en lo que necesitas guardar, en función de la forma en que uses la cocina y cuántos seáis en casa, y determina qué tipo de elementos necesitas. Elige un despensero, un mueble platero, barras de colgar, un armario escobero, un módulo de estantes, etc.

En cuanto al interior de los módulos de cocina, se necesitan soluciones personalizadas para aprovecharlos al máximo. Hay una larga lista de opciones disponibles para organizar el espacio: cuberteros, accesorios para dividir el espacio, soportes para platos o para las tapaderas de las cazuelas, etc. La clave está en añadir funcionalidad a tu cocina para lograr el máximo almacenaje.

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5. Opta por el mobiliario adecuado

Este paso es uno de los más importantes, ya que los muebles de cocina son un elemento esencial. Deben adaptarse al espacio disponible para rentabilizarlo al máximo. Puedes combinar muebles bajos, módulos en columna, armarios con o sin baldas, cajones y gavetas, etc. Existe un amplio repertorio de materiales, diseños, colores y acabados para elegir. Lo importante es lograr una cocina funcional, pero también decorativa.

En 2024 triunfan las cocinas de líneas sencillas, minimalistas, con la madera como material estrella, sobre todo en tonos claros o medios. En cuanto a los colores, destacan los cálidos como el color arcilla, el tierra o el beige. También triunfan los blancos, los tonos grises y piedra, y el verde.

Un consejo: elige materiales de calidad. La cocina ha de durar mucho tiempo en perfecto estado, y necesitamos materiales que aguanten el uso intenso y diario sin deteriorarse.

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7. Instala nuevos electrodomésticos

Seguramente no tengas que cambiar los electrodomésticos todos a la vez, porque algunos de los antiguos te servirán todavía. Tanto si tienes que renovarlos como si tu cocina es nueva y tienes que equiparla, elegir correctamente los electrodomésticos ha de ser una prioridad. Como la sostenibilidad es un aspecto clave a tener en cuenta, elige modelos eficientes que te ayuden a economizar agua y electricidad.

Si es posible, piensa en panelar el lavavajillas o el frigorífico para ocultarlos y así lograr un resultado más limpio y decorativo.

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8. Diseña la iluminación

Uno elementos esencial es la iluminación. La forma en que se ilumina la cocina es muy importante a la hora de usar este espacio al final del día. Una cocina oscura no favorece los procesos de trabajo, sino que los hace más incómodos.

Además de potenciar en lo posible la luz natural, conviene diseñar una buena iluminación artificial, con lámparas en las zonas de trabajo o en el comedor, que evite las zonas de sombra. Una buena idea es instalar luces LED bajo los armarios superiores para conseguir una luz indirecta práctica y decorativa.

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9. Apuesta por complementos que añadan valor

Es el momento de buscar accesorios que completen la decoración de la cocina. Pueden ser taburetes o sillas para la zona de office, accesorios para cocinar, tablas de cortar, plantas, un cuadro especial que queras poner en la pared, y otras muchas ideas. Es fundamental añadir algún detalle que personalice la cocina y le aporte tu propio estilo.

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