Lograr que tu casa, además de enamorarte, te resulte cómoda y fácil de vivir pasa por aprovechar bien cada espacio, cada rincón, en función de nuestras propias necesidades. Puede que necesites más sitio para guardar, crear un rincón de estar tranquilo o contar con una zona de trabajo donde puedas concentrarte.

Sean cuales sean tus propias necesidades existen miles de formas geniales de aprovechar correctamente el espacio que te brinda tu casa. Una de ellas es instalar una zona de asientos bajo una ventana. Descubre cómo puedes conseguirlo.

Tu rincón favorito

Todos tenemos un rincón favorito en nuestra propia casa y, si tú no lo tienes, solo tienes que pensar en qué zona de tu casa te gusta más pasar el tiempo, cuando no tienes nada que hacer y simplemente quieres relajarte. Puede que sea el sofá del salón o una butaca en el dormitorio.

Crear un espacio de asientos debajo de una ventana puede ser la clave que te ofrecerá un estupendo rincón personal. Pero para que esto suceda, el espacio tiene que cumplir ciertos requisitos: ha de ser cómodo, confortable y ofrecerte las condiciones que necesitas para estar a gusto. Debe tener unas buenas vistas del exterior, ser un espacio luminoso en el que leer cómodamente, etc.

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En cualquier habitación

Para establecer este rincón de asientos es importante contar con el espacio adecuado. Para empezar, ha de ser una ventana en la que no haya radiador (es habitual que lo instalen justo debajo) y que tampoco esté en una zona de paso. Por lo demás, da igual si está en el slaón o en la cocina.

- En el dormitorio puede convertirse en un espacio íntimo y personal. Si pones un banco con almacenaje podrás guardar el calzado, por ejemplo, u otras muchas cosas. ¿Tienes una pared con una ventana en el centro? Diseña dos armarios de suelo a techo, uno a cada lado de la ventana, y crea una zona de asientos debajo de la misma.

- En el salón también puedes crear tu rincón especial para estar, para leer, escuchar música, etc.

- En la cocina, si cuentas con metros cuadrados suficientes, añade al banco junto a la ventana una mesa y habrás conseguido un espacio de office para comer.

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Las medidas adecuadas para un asiento

Para que una zona de asientos bajo la ventana resulte cómoda ha de tener unas dimensiones adecuadas:

- La longitud, mayor o menor, será la del hueco disponible.

- Para establecer la profundidad del banco, lo ideal es que sea de 40 a 50 cm.

- La altura desde el suelo debe ser de 45 cm como mínimo.

No es imprescindible contar con respaldo. De hecho, de tenerlo, debería estar en uno de los laterales o en el espacio que queda bajo la ventana (no siempre existe esta opción).

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Un banco a medida

Existen varias opciones para poder contar con una zona de asientos debajo de una ventana. Puedes encajar un banco que hayas comprado, si tienes la suerte de que las medidas se ajustan al hueco. Esta opción es la más sencilla y también la más económica.

Si no encuentras ningún banco que se adapte a lo que necesitas, puedes mandar hacerlo a un carpintero. Quedará perfecto, porque serás tú quien lo diseñe, con las medidas exactas, pero no será barato.

Si eres un experto en bricolaje y sabes trabajar con madera, puedes lanzarte a la aventura de hacerlo tú mismo. Antes de empezar, haz un boceto y piensa en cómo quieres que sea tu banco: con espacio para guardar en el interior, abierto, con puertas o cajones, etc.

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Espacio extra para guardar mil cosas

Es una de las ventajas de contar con un banco debajo de una ventana: que en el interior podrás almacenar bastantes cosas, y eso nunca viene mal.

Existen varias formas de materializar esta idea: puedes poner un banco con tapa abatible, lo que te ofrece un fácil y cómodo acceso al interior. Pero no es la única alternativa. También puedes dejar el espacio abierto y colocar, por ejemplo, libros o cajas decorativas. O puedes cerrar ese espacio inferior con puertas (correderas o abatibles) o instalar cajones.

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Ideas que aportan confort

Una vez cuentes con el banco de asientos debajo de tu ventana llega el momento de hacer ese rincón más confortable y acogedor, ya que de lo contrario nadie querrá sentarse allí.

Para lograrlo los textiles son una baza decisiva. Puedes colocar una colchoneta tapizada, que resulte mullida, de 5 8 cm de grosor y de las medidas del propio asiento. También es buena idea añadir algunos cojines que, además ha comodidad, aportan un toque muy decorativo. Puedes elegir las telas a tu gusto, lisas o estampadas.

Un consejo: en determinados espacios, como la cocina, lo mejor es optar por tejidos resistentes y fáciles de lavar, que soporten bien las manchas.

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Crea un espacio bien iluminado

Aunque al estar junto a la ventana tu nuevo rincón de asientos cuente con mucha luz natural, es buena idea añadir algunas soluciones de iluminación artificial para poder aprovechar el rincón al caer la noche. Instala luces empotradas en el techo o un aplique decorativo en la pared.

Una idea: poner un regulador de intensidad para estas lámparas es una buena idea que te permitirá contar con la luz adecuada para cada momento, más o menos potente.

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Los estores adecuados

Aunque te encante disfrutar de las vistas en tu nuevo rincón favorito, es necesario tamizar la luz que entra por la ventana, sobre todo si está orientada al sur o al oeste.

Para este tipo de espacios los estores son la solución más cómoda, ya que no queda espacio suficiente para las cortinas, que serían un estorbo. Explora los diferentes mecanismos uy tipos de estor que te ofrece el mercado para dar con la solución que más te convenga.

Un consejo: un estor blanco o de un tono neutro y claro es una opción infalible, con la que acertarás seguro y de la que no te cansarás con el tiempo.

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Una idea genial para espacios difíciles

Instalar un rincón de asientos debajo de una ventana se convierte en una idea formidable cuanto se trata de huecos difíciles o que tienen poco aprovechamiento.

Puede ocurrir, por ejemplo, que el recorrido de una escalera deje un pequeño rincón con una ventana. O que esta se encuentre en un distribuidor donde resulta difícil y poco práctico instalar muebles.

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