Freírlas es la forma tradicional de prepararlas, pero hacer croquetas al horno se ha convertido en una alternativa cada vez más popular: son más ligeras, dejan menos olor en la cocina y, con la técnica adecuada, quedan igual de sabrosas. La clave está en conseguir ese equilibrio perfecto entre capa crujiente y relleno suave, sin perder un ápice de sabor.
De bacalao, pollo, setas, pringá, gambas… ¡la variedad es inmensa! Pero las croquetas por excelencia son, sin duda, las de jamón ibérico. Y si pueden ser 'las de la abuela', mejor que mejor, que es la receta que aquí te mostramos.Por Susana Baticón