Esta receta es tan sencilla como colocar las sardinas entre dos capas de sal y hornearlas. Al romper la costra para comerlas. se libera un aroma intenso y una textura jugosa que no se logra con otras técnicas. Si quieres aportarle algo de aroma, no dudes en añadir al pescado tus hierbas aromáticas y especias favoritas. Resultan deliciosas tomadas así, pero igualmente las puedes acompañar con alguna vinagreta ¡están de escándalo!
Te recomendamos




