Con esta receta no tendrás ningún remordimiento porque se trata de un helado sano que tan solo lleva fruta congelada, queso crema o yogur bajos en calorías y unas pepitas de chocolate. Es tan fácil y rápido de preparar que, cuando lo descubras, no dejarás de hacerlo y probar con diferentes sabores. Este refrescante postre te ayudarás a soportar algo mejor el inevitable calor de la temporada veraniega sin apenas llenar tu cuerpo de calorías.
¿Qué ingredientes necesitamos para hacer un helado saludable?
Para hacer un helado saludable y bajo en calorías tan solo necesitas alguna fruta que sea dulce como la sandía, el mango, el plátano, el melón, etc, y mejor si está más madura porque aportará mayor dulzor natural sin que tengas añadir azúcar ni otro edulcorante, a la que se añade una base cremosa: yogur natural o griego sin azúcar, queso crema, kéfir o bebidas vegetales (coco, almendra, soja...).
Si necesitas más dulzor, puedes añadir dátiles, miel, sirope de agave o edulcorantes naturales como eritritol. Y si buscas añadir un toque de textura, prueba a incorporar frutos secos, pepitas de chocolate o coco rallado, y le aportarás un sabor diferente con especias como vainilla, canela o jengibre.
¿Cómo hacer un helado saludable?
En tan sencillo como seguir estos pasos:
- Cortar la fruta pelada y sin semillas y congelarla durante varias horas.
- Triturar con un procesador potente hasta convertir en polvo.
- Mezclar con la base cremosa y poner el resultado en un recipiente para congelar.
- Añadir unos chips de chocolate y congelar durante, al menos, 3 horas.