Jesulín de Ubrique dice adiós a 'MasterChef' con su mítica frase: 'Im-presionante'

El torero ha sido el décimo expulsado del concurso para sorpresa de sus compañeros

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Jesulín de Ubrique tuvo que decir adiós a las cocinas MasterChef Celebrity a las puertas de la semifinal. Después de haber llegado a un entendimiento con sus compañeros y de que todos le hubieran cogido cariño, el torero se convirtió en el décimo expulsado del concurso. El marido de María José Campanario formaba parte del grupo liderado por Toñi Moreno en la última prueba de eliminación junto a Blanca Romero. Todo parecía marchar a la perfección hasta que Jordi Cruz les planteó un decisivo y complicado reto: cambiar de cocinas.

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Cuando llevaban más de una hora cada equipo en la elaboración de sus platos, el juez cambió la estrategia y decidió que cada equipo debía elaborar los platos del contrario. Poco o nada sabían de los platos de sus rivales, pero los jueces valoraron la actitud y cómo afrontaron la prueba cada uno de los equipos. Esto convirtió en ganadores a Daniel Illescas, Laura Londoño y Álvaro Muñoz Escassi. 

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Jesulín, Toñi y Blanca se enfundaron los delantales negros, sabiendo que uno de ellos abandonaría el concurso. En la prueba de expulsión tuvieron que hacer una réplica de trampantojos, unas recetas que nada tienen que ver con su apariencia. Blanca Romero se enfrentó al plato más complicado, pero finalmente resultó el mejor para los jueces. La decisión estaba entre Jesulín y Toñi Moreno. Y el aspirante que se quedó a las puertas de la semifinal resultó ser el torero.

Sus compañeros se emocionaron al tener que despedirse de él. "Conozco a Jesús mucho, desde los 14 años. Es un tío luchador", señalaba Toñi Moreno. "Hacía mucho que no convivía con él. Pero mi compañeros estarán de acuerdo cuando digo que es el tío más noble y más verdad que hemos visto en este programa. Es un pedazo de compañero", añadía la presentadora, que se despedía con un "te quiero". Unas palabras que emocionaban a Jesulín, que correspondía el gesto. Blanca Romero destacó de él que "es un corazón necesario", mientras que Daniel Illescas manifestó que va a echarle mucho de menos en el concurso. "No estoy contento porque le he cogido mucho cariño", ha reconocido."Ha sido como un padre para mí aquí. Ellos lo saben. Ha estado en lo bueno y en lo malo", contaba. El diestro de Ubrique le deseaba lo mejor al influencer de cara a la final. "Muere con las botas puestas. Pelea. Intenta llegar hasta el final y luego ya que te echen, que tampoco quiero que ganes", relataba entre risas.

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El humor ha sido la tónica habitual del décimo expulsado en el concurso. Antes de colgar el delantar, el diestro hizo un resumen de su paso por el talent culinario: "Me voy de aquí muy contento. Yo lo definiría en dos palabras: im-presionante", bromeó, provocando la risa de sus compañeros. El maestro contó cómo surgió esa conocida expresión. Acudió a Roma a visitar al papa Juan Pablo II. Salió de allí tan emocionado que su reacción al ver las cámaras que le esperaban a la salida fue: "Yo lo definiría en dos palabras: im-presionante". De ahí la frase que ha quedado para la posteridad. 

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