Siete meses tiene ya su muñeco, bueno, no es un muñeco, es un niño de carne y hueso pero con una carita tan simpática y perfecta que parece salido de la imaginación. Axl Jack se ha convertido en la compañía perfecta para sus padres y es que va con ellos a todas partes. A pasear, a comer, de compras… Josh Duhamel y Fergie no se separan del bebé, que nació en agosto del pasado año y que con el tiempo se ha convertido en la viva imagen de la artista. Ojos grandes, piel blanca y pelo rubio hacen de él un angelito cuyo look sin embargo no tiene nada de “inocente”.
Y es que la vena “rockera” de sus papás está presente en sus estilismos. No podía ser de otra manera, de tal palo tal astilla. Josh no puede evitar que se le caiga la baba con su niño y, siempre que tiene oportunidad, se va con él por ahí. En esta ocasión, se marcharon a desayunar, ellos dos solos, disfrutando de un momento padre e hijo. Axl iba encantado en brazos del actor, se le notaba en la carita, risueña y sonriente, aún más si cabe porque entrecerraba los ojos debido al sol. Parecía un pequeño rockero con la gorra ladeada, ¿no creen?
De momento, a pesar de lo “enano” que es, cariñosamente hablando claro, está dando ya mucho que hablar. Y no sólo porque aparece en todas las ocasiones en las se ve a sus padres sino porque estos han decidido hacer de él una estrella en las redes. Y es que con esa carita está para comérselo, ¿no presumirías tú también?
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