Julie Andrews, conocida mundialmente por su interpretación en Mary Poppins, la niñera más famosa de todos los tiempos, recibirá el premio Donostia por toda su carrera en la 49ª edición del Festival Internacional de Cine de San Sebastián. Además, el certamen completará su homenaje con la proyección de la última película de la inolvidable protagonista de Sonrisas y lágrimas, filme que la consagró como actriz y supuso su despegue en la gran pantalla, en el teatro y en la televisión. El actor Paco Rabal, fallecido recientemente, también recibirá, a título póstumo, el mismo reconocimiento, por su trayectoria ante las cámaras.
Nacida en Surrey, Inglaterra, el 1 de octubre de 1935, Julie Andrews, ha bailado tanto con el drama como con la comedia. Dueña de una voz prodigiosa y capaz de alcanzar todo tipo de registros interpretativos, desde niña estuvo destinada a alcanzar el éxito. Con apenas veinte años ya había tenido la oportunidad de demostrar su gran potencial en Brodway en The boyfriend y en My fair lady. La televisión se encargó de que su rostro se hiciese popular gracias a la serie Cinderella, aunque la actriz tuvo que luchar para que la gran pantalla le abriese sus puertas -no consiguió participar en la versión cinematográfica de My fair lady, que finalmente hizo Audrey Hepburn-.
En 1964 Andrews tuvo su gran oportunidad gracias a una niñera simpática y algo extravagante capaz de volar con su paraguas o hacer hablar a los pájaros. Su trabajo fue recompensado con un Oscar de la Academia de Hollywood. Su boda con el director Blake Edwards en 1969 dio lugar a un tandem que dio frutos como ¡Así es la vida!, Víctor o Victoria o Darling Lili.
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