Marta Hazas y Javier Veiga nos desvelan los secretos de su éxito y cómo es trabajar juntos

©JAVIER SALAS

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En Amigos hasta la muerte son productores, protagonistas, y Javier, director y guionista, y la película llega a los cines el 22 de septiembre, para contar la historia de María, Nacho y Suso en una comedia muy especial. “¡Esta vez sí ha sido lanzarnos!”, nos dicen durante la sesión de fotos en Santander, la tierra de la actriz, y donde se casaron el 1 de octubre de 2016. “No son tanto por el resultado empresarial, sino porque lo que tú crees que va a hacer reír o emocionar a la gente, efectivamente ocurra, que esa magia suceda”, nos confiesan.

“Creíamos que esta es una historia muy personal que debíamos contar en primera persona y pienso que el alma que hemos puesto se refleja en la pantalla”

“Nos apetecía meternos en esta aventura y todo ha salido muy bien, estamos muy contentos. Queríamos contar esta historia y hacerlo nosotros con el tono de comedia que tiene Javi y con el fondo que deseábamos”, nos cuenta Marta Hazas. Aunque nos confiesan que ha sido complicado ocupar tantas facetas como lo han hecho ambos. “Creíamos que esta es una historia muy personal que debíamos contar en primera persona y pienso que el alma que hemos puesto se refleja en la pantalla”, añade Veiga.

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‘Una comedia muy emotiva’

Además, le preguntamos al actor si escribió el personaje de María pensando en Marta o no tuvo nada que ver. “El original, cuando parte esta historia, no estaba hecho para Marta, pero el guion sí. Es decir, cuando empecé a desarrollarlo ya sabía que Marta iba a interpretarlo. No hace falta que me convenza, claro, porque tengo la suerte de compartir casa con una de las mejores actrices de España, sería absurdo llamar a otra para hacerlo. O sea, lo tengo más fácil imposible”, nos responde entre risas.

“El personaje original, cuando parte esta historia, no estaba hecho para Marta, pero el guion sí. Es decir, cuando empecé a desarrollarlo ya sabía que Marta iba a interpretarlo”

La pareja confiesa en ¡HOLA! que es una comedia ‘muy emotiva’, pero también cuenta con tintes de drama. “La comedia es el género que más me gusta, sobre todo, para que lleguen ciertos mensajes que serían demasiado densos o moralizantes de otra manera”, nos cuenta Hazas. Pero, ¿cómo es trabajar tan ‘intensamente’ juntos, prácticamente 24 horas al día?

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“Sin ninguna duda, en el momento de levantar los proyectos son 24 horas, porque hasta sueñas con ello. Pero la verdad es que ambos entendemos la profesión de la misma manera y nos divierte el mambo y asumir ciertos riesgos. Y luego, como estábamos los dos empeñados a partes iguales en querer contar esta historia, todo se da de manera natural y fácil”, confiesa la actriz.

Aunque trabajen juntos, y se entiendan a las mil maravillas, ¿sois capaces de deciros a la cara lo que no os gusta de lo que ha hecho cada uno? “Totalmente. Además, Javi, que dirige, en este caso, lo dice muy educadamente y con mucha sensibilidad, pero lo dice”. Mientras que Javier añade: “Yo soy el director y tengo que decirlo, aunque sea con mano izquierda. Marta no tiene mano izquierda, con lo cual lo dice igual. Entonces, al final, estamos empatados (risas)”.

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Su historia de amor

Se conocieron en el rodaje de Muertos de amor, en 2012, y en breve celebraran siete años de casados. ¿Son de recordar las fechas de los aniver­sarios? “Al año casarnos fuimos a El hormiguero y nos preguntaron qué día nos habíamos casado. Y Javi responde: ‘El 1 de noviembre’», y yo: ‘que no, el 1 de octubre’. Y él: ‘Que no, el 1 de noviembre’. Y así estuvimos discutiendo en directo”, nos cuenta Marta Hazas entre risas. “Pero vamos, sí lo celebramos. A mí las fechas me gustan y siempre hay una cenita o una escapadita, seguro”, añade.

¿Y qué es lo que más valoráis el uno del otro? “De Javi, su increíble capacidad de trabajo, que me parece infinita. Y luego, cómo se toma los reveses de la vida o las malas rachas. Él es capaz llevarlo bien y no dejar que tiña todo lo demás. Tiene la objetividad para ser capaz de diferenciar, y eso me parece muy bonito y muy difícil de hacer”. Mientras que él, lo tiene claro: “Yo de Marta diría que buscar siempre el lado divertido de las cosas e intentar encontrar en todo la parte juguetona, hacer de todo una fiesta, creo que eso es una gran virtud”.