Tamara Falcó muestra la joya única que le regaló Íñigo Onieva en la fiesta de compromiso

La marquesa de Griñón, muy ilusionada, ha contado algunas anécdotas de la celebración

Por hola.com

Tamara Falcó está aún en una nube tras la inolvidable velada del pasado sábado en la que su familia y la de Iñigo Onieva se reunieron para celebrar el compromiso de la pareja. Tal y como contó ¡HOLA!, la marquesa de Griñón recibió como regalo de su novio una joya única elaborada por el diseñador José G. Onieva, tío del empresario y no ha dudado en mostrarla a cámara en El Hormiguero, donde también ha explicado el siginificado de la creación. 

"La ha hecho a mano y han escogido los rubíes porque es la piedra del amor, pero además, me ha parecido un detallazo porque ha puesto uno por cada hermano que tengo, es decir, nueve", ha contado sin poder dejar de sonreír. Además, de presumir de regalo, la marquesa de Griñón ha desvelado algunas curiosidades como la puntualidad de los Onieva, ya que su familia política llegó tan solo pasado un minuto de las 9 de la noche, hora de la cita. Tamara asegura que ella bajó a los cinco minutos, su hermana Ana Boyer, a la media hora e Isabel Preysler "cuando pudo", ha dicho su hija entre risas.

Aún así, la espera no ha podido ser más entretenida ya que Íñigo se encargó de amenizarla con unos cócteles. Antes de la cena, que planificó la propia Tamara y para la que se juntaron 25 personas, hubo tiempo para los discursos, algo que les encanta a los Falcó, según ella reconoce. En ellos, no han faltado los homenajes a su padre, el recordado marqués de Griñón que falleció en 2020.

Tras la cena, algunos amigos de los novios se sumaron a la celebración, entre los que se encontraban las hermanas Lucía (prometida de Álvaro Gomis y a punto también de pasar por el altar) y Gabriela Domínguez Vega-Penichet y varios miembros de su pandilla gastronómica, como el matrimonio formado por la periodista Casilda Aguilera y Yago Anton. Todos ellos disfrutaron de la música en directo, a cargo del grupo Third Floor contratado por Íñigo y Álvaro Castillejo, primo de Tamara, que lo organizaron como una sorpresa. La fiesta se alargó hasta las 4 de la mañana aproximadamente. Al día siguiente fue el turno de Ana Boyer que celebró su cumpleaños cogiendo el testigo de su hermana.