¡Conejos gigantes y juegos infantiles! Las imágenes más simpáticas de los Biden celebrando la Pascua

Los jardines de la Casa Blanca han recibido a miles de niños que han disfrutado de divertidas carreras y otras actividades

Por Carla Calvo

Los jardines de la Casa Blanca han sido el escenario de un gran día en el que tradición y diversión se han dado la mano para celebrar un Lunes de Pascua memorable. Como cada año, ha tenido lugar el icónico 'Easter Egg Roll', un juego infantil en el que miles de niños buscan coloridos huevos en los exteriores de la residencia presidencial para después empujarlos hasta una meta utilizando una gran cuchara de madera. Los anfitriones, el presidente de Estados Unidos, Joe Biden, y la primera dama, Jill Biden, han sido las grandes estrellas de este festejo primaveral, en el que han estado acompañados por dos animadores disfrazados de enormes conejos.

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Joe y Jill Biden, que también han estado arropados en esta cita por la vicepresidenta del país, Kamala Harris, y su marido, Douglas Emhoff, han acaparado todas las miradas y han protagonizado unas imágenes de lo más simpáticas. Desde el inicio de la celebración ambos se han mostrado entusiasmados y así lo han evidenciado a través de grandes sonrisas en sus rostros y gestos de alegría. Desde uno de los balcones del emblemático domicilio oficial en Washington, que ha sido decorado para el evento con tulipanes naranjas y violetas, símbolo de renacimiento y de la llegada de esta época, hortensias azules y otras flores en tono verde, el presidente y la primera dama han saludado y dado la bienvenida a las nuevas generaciones que han colmado de ilusión y de energía sus jardines.

Para la ocasión, Joe Biden, de 80 años, ha optado por un clásico traje azul marino que ha combinado con camisa blanca, corbata en un azul más apagado y zapatos negros. Por su parte, su esposa, de 71, se ha inclinado por un 'total look' amarillo verdoso pastel algo más informal pero sofisticado compuesto por blazer de doble botonadura, pantalón de pinzas a conjunto y sneakers blancas.

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El recibimiento ha estado marcado también por la presencia de dos grandes figuras muy representativas de la Pascua: dos animadores enfundados en trajes de conejo de colosal tamaño y llamativas orejas que han puesto la nota de humor y de originalidad al evento, en el que han participado de forma muy activa. Además ambos han lucido en sus respectivos conjuntos los mismos colores que el mandatario y su mujer en sus estilismos, siendo el azul y el amarillo los dos colores elegidos, uno de ellos en versión vestido y otro en conjunto de chaleco, pantalón y pajarita.

Junto a ellos han posado en el mirador y, minutos más tarde, han bajado al césped, donde han continuado con el tradicional juego junto a los menores. Un pasatiempo que comenzó el presidente Rutherford Hayes, quien en 1878 decidió abrir por vez primera las puertas de la Casa Blanca a un grupo de niños después de que el Congreso de Estados Unidos emitiera la prohibición de jugar en el césped del Capitolio.

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En la zona verde de la Casa Blanca los jóvenes han disfrutado de entretenidas carreras de huevos de Pascua, así como de otras actividades lúdicas, deportivas, formativas y de un área de aperitivos. La primera dama, que siente auténtica devoción por los niños y ha ejercido de maestra en su trayectoria profesional, se ha animado incluso a leer un libro a los invitados. "Como primera dama y como profesora, he visto muchas veces que el aprendizaje no solo ocurre en las aulas. Hay muchas otras oportunidades de aprender cada día", ha expresado Jill Biden, que también ha remarcado las posibilidades que tiene el país si se confía y se apuesta por las generaciones venideras.

Por su parte, Joe Biden, silbato en mano, ha ejercido de árbitro en algunas de las carreras, ha aplaudido los logros y se ha fotografiado con los pequeños, con quienes ha vuelto a vivir esta tradición con entusiasmo y admiración.

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