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No todo es perfecto en la vida de los Beckham. Ser una de las familias más célebres y acaudaladas de Inglaterra también conlleva importantes riesgos y puede tener algunos serios inconvenientes. De este modo, el matrimonio compuesto por David y Victoria recibía hace muy pocos días una aterradora noticia: tres hombres encapuchados habían intentado entrar a robar en Cotswolds, la mansión campestre que poseen en Great Tew, en el condado de Oxfordshire. Según ha informado el periódico Daily Mail, los hechos tuvieron lugar en la noche del pasado viernes 19 cuando, afortunadamente, la pareja se encontraba de viaje rumbo a Australia junto a sus tres hijos menores, Romeo, Cruz y Harper, por lo que no pudieron ser sorprendidos en su interior.
Al parecer, el equipo de vigilancia de 24 horas de la casa comprobó a través de un circuito cerrado de televisión la presencia de varios extraños en el interior de la propiedad, de modo que avisaron a la policía de manera inmediata. Así, los individuos fueron captados intentando subir por una escalera para mirar a través de las ventanas del piso superior antes de salir corriendo. Tal y como apunta el medio británico, los huéspedes del vecino Soho Farmhouse también vieron a los sospechosos e intentaron ahuyentarlos.
Sin duda, unos inquietantes acontecimientos que han motivado que los Beckham, muy preocupados, se vean obligados a incrementar aún más las medidas de seguridad en su hogar, valorado en torno a los 7 millones de euros. De este modo, se ha apuntado a que el nuevo dispositivo podría incluir perros guardianes, alarmas con sensores de movimiento y patrullas regulares con el fin de evitar que más intrusos se acerquen a sus terrenos.
"David y Victoria están absolutamente devastados por esto. Son extremadamente protectores con su familia y su vida en el hogar, por lo que la simple idea de que alguien intentara entrometerse es muy molesta para ellos”, declaraba al Daily Mail una fuente cercana al exfutbolista y la diseñadora. "Les ha golpeado duro. Victoria está muy afectada. Es aterrador y espantoso pensar que alguien podría estar invadiendo su espacio personal”, añadía.
También ha apuntado que, por su parte, el antiguo capitán de la selección inglesa se encuentra furioso por lo sucedido: "David odia el hecho de tener que contar con una tecnología tan avanzada y una seguridad demasiado estricta a su alrededor. Le encantaría ser normal, pero su prioridad número uno es proteger a su esposa, a sus hijos y a su familia”.
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