Iago Aspas no pensaba ni en sueños ir al Mundial de Rusia, pero el delantero gallego, de 24 años, ha sido clave en la clasificación de la selección española para octavos. El jugador del Celta de Vigo fue el protagonista del empate ante Marruecos, un gol que celebró con su familia, porque en las gradas del estadio de Kaliningrado se encontraba su pareja, Jennifer Rueda -con la que contraerá matrimonio en breve y que está embarazada del segundo hijo de la pareja, que será una niña-, y su hijo Thiago, que acaba de cumplir dos años. "Era muy importante. Vino mi familia a verme por primera vez y es un día muy especial para mí", dijo el futbolista. "Que fuese el primer partido en el que me venían a ver en una Copa del Mundo, poder marcar... Era una ilusión muy grande. Estoy muy contento, por supuesto", añadió.
Jennifer, por su parte, hizo partícipes a todos sus seguidores de Instagram de la victoria de la selección. "Orgullosos de ti, papi, lo que nos haces sentir es increíble, eres el mejor 😊 te seguiremos al fin del mundo TE AMAMOS ❤️", ha publicado junto a este carrusel de fotos.
Fue el pasado 21 de septiembre cuando la pareja anunciaba a través de las redes su compromiso con un vídeo en el que el futbolista ponía el anillo a su chica, que no dudaba en contestar "sí, quiero". El futuro matrimonio reside actualmente en Moaña (Pontevedra), aunque Jennifer siempre ha acompañado a Iago en sus destinos profesionales como Liverpool o Sevilla.
El broche de oro a su relación llegó el 17 de junio de 2016, cuando nació su primer hijo, Thiago. "No necesito nada más... Thiago Aspas Rueda. Te amamos bebé", escribía la pareja del futbolista, que hace solo nueve días felicitaba su segundo cumpleaños a su hijo. "Feliz cumpleaños amor. Papi te quiere mucho", comentaba junto a un álbum de fotografías del pequeño.
Solo días antes de poner rumbo a Rusia, la pareja anunciaba que pronto ampliarán la familia con la llegada de su segundo hijo. "FELICIDAD en estado puro, aumentamos la familia", escribía el deportista junto a una instantánea en la que se podía ver la incipiente barriguita de Jennifer y las manos de los tres miembros de la familia.
