Orbaneja del Castillo, planes en el pueblo más bonito de Burgos
Desde los bosques de roble, encina y abedul en los que hacer rutas senderistas, hasta el cañón de roca, agua y verdor que forma el río Ebro, recogemos todo lo que tienes que ver en Orbaneja del Castillo si tienes la suerte de poder visitarlo.
¿CÓMO LLEGAR A OBBANEJA DEL CASTILLO?
La localidad se encuentra a 66 km de Burgos, en el extremo noroccidental de la provincia prácticamente en el límite con Cantabria. Un pueblo burgalés muy fotogénico primero por su ubicación, en una colina escalonada que se eleva sobre las paredes del cañón del Ebro. Pero también por un armonioso conjunto rural de viejas y empinadas rúas que conserva el sabor de su arquitectura popular y que ha merecido ser conjunto histórico.
El rumor del agua es su música ambiental. Y es que una de sus mejores imágenes la ofrece la poderosa cascada que brota de la Cueva del Agua y se precipita en el cauce del río. El torrente, de 25 metros de altura, nace, corre, salta y muere en unos pocos segundos para al fin explotar en la roca musgosa y dividir en dos el caserío.
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¿QUÉ VER EN ORBANJEA DEL CASTILLO?
Una visita a la localidad –es pequeña y se recorre en no mucho tiempo– pasa por admirar sus casonas típicas montañesas –como la de los Canes o la de los Pobres–, subir y bajar por las calles empedradas y llegar hasta llegar hasta la iglesia de Santa María, con una torre que sobresale entre la vegetación. También habrá que pasar por la Cueva del Agua, a la que se accede desde la plaza de la villa, donde nace el arroyo que forma su famosa cascada y que lo divide en dos partes. La cueva es posible visitarla con guía.
Encanto tienen las calles y las construcciones de Orbaneja, pero deliciosas son las múltiples sendas que recorren uno de los parajes más bellos de España. Es el que ha cincelado la impetuosa corriente del Ebro, en los páramos calcáreos de La Lora. Un tajo de más de 200 kilómetros de profundidad de hoces y cañones, riberas escarpadas y meandros que serpentean en los valles. Es el rincón más verde y fresco de Burgos.
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MEJORES RUTAS EN ORBANEJA DEL CASTILLO
El agua es el protagonista en las rutas que atraviesan el Parque Natural de las Hoces del Alto Ebro y Rudrón. Este último río es el hermano menor del Ebro, en cuyo curso se funde y se confunde encajonado también entre el verdor. Antes de elegir la senda, conviene saber que por este espacio protegido transcurre el Camino Natural del Ebro GR 99, que acompaña el curso del río a lo largo de 930 kilómetros. Más cortos que este sendero de Gran Recorrido, existen otros de distinta dificultad, tanto para el senderismo como para la bicicleta.
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RUTA ENTRE ORBANEJA DEL CASTILLO Y PESQUERA DEL EBRO
Discurre entre ambas localidades y está señalizado como PR-C.BU-1. Son en total 15 kilómetros, en los que tenemos que invertir unas seis horas y media. El trayecto sigue el borde rocoso del cañón y se adentra por el fondo de la garganta hasta cruzar una pasarela que cruza el río Ebro. En el camino, bosques mixtos de encinas, quejigos, arces, alisos, madroños, acebos y tejos. Abajo, en las aguas esmeraldas, nadan las nutrias. Y arriba, sobre los cortados, más de mil parejas de buitres leonados, águilas perdiceras, alimoches y halcones peregrinos. Durante el verano, plantas aromáticas perfuman las paredes calcáreas del cañón, que alcanzan alturas de vértigo y forman relieves caprichosos.
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RUTA DEL CAÑÓN DE RUDRÓN
Esta ruta, bien señalizada, tiene 3 kilómetros y recorre parte del cañón del Rudrón. La senda discurre paralela al curso del río, por el fondo del desfiladero, y atraviesa Covanera, donde, tras un paseo, se llega al Pozo Azul. En realidad es una surgencia que exhibe un intenso color turquesa y una curiosa característica: no tiene fin. Se han llegado a contabilizar 13 kilómetros de longitud, pero la cueva aún continúa.
RUTA TORNOS DE TUDANCA
Otro recorrido apetecible es la sexta etapa del GR-99. Discurre entre Pesquera de Ebro y Manzanedo. Son 11 kilómetros y tres horas y media de caminata a pie por un estrecho desfiladero que el Ebro ha modelado en la sierra de Tudanca hasta llegar a un puerto con una vista excepcional.
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Y en medio de tanta naturaleza, otros pueblos bonitos que, además de Orbaneja, se asoman a la ruta, ideales para coger fuerzas con buenos vinos y delicias locales. Pesquera del Ebro, con sus casas blasonadas y antiguos palacios; Cortiguera, donde Miguel Delibes se inspiró para El disputado voto del señor Cayo; o Valdelateja, que hundido en el fondo del valle acoge también la unión del Ebro y el Rudrón en un maravilloso enclave.
MUY PRÁCTICO
Dónde dormir
En Orbaneja del Castillo, en La Puebla (orbanejadelcastillo.es), un hotel rural con encanto en un enclave privilegiado que ofrece habitaciones y apartamentos. Terraza con bonitas vistas al pueblo, desayuno artesanal y ambiente rústico. En Bisjueces, en La Torre de Bisjueces (latorredebisjueces.com), una antigua casona del siglo XVIII totalmente restaurada con amplias y señoriales habitaciones con paredes de piedra vista.
Dónde comer
El típico cordero lechal curro podemos degustarlo en Valdelateja, donde se encuentra el asador Santa Centola (asadorsantacentola.com) además de excelentes carnes rojas de vaca. En Pesquera del Ebro, el Mesón del Cañón (pesqueradeebro.com) ofrece gastronomía típica de la zona a buen precio en el centro del pueblo. También cuenta con dos alojamientos rurales para 6 y 10 plazas.