El hijo pequeño del príncipe Carlos Felipe y la princesa Sofía se hace mayor. Gabriel de Suecia cumplió ayer 3 años, esa edad que marca la frontera entre el bebé y el niño y en la que se atesoran los primeros recuerdos de la vida. Sus padres se encargaron de que este cumpleaños, de los primeros que recuerde, fuera realmente inolvidable y, como es tradición en la realeza, compartieron con sus seguidores un nuevo retrato del benjamín de la familia en el momento más especial de su fiesta. La fotografía en blanco y negro muestra al príncipe Gabriel con una pícara sonrisa, reflejo de su entusiasmo, ante su irresistible tarta de cumpleaños, con forma de dinosaurio o, tal vez, de dragón. De lo que no deja lugar a dudas la instantánea, en cambio, es de sus aviesas intenciones de ¡atacar el pastel! en cuestión de segundos, no más de lo que tardara en hacer clic la cámara. “Felicidades a nuestro amado Gabriel en su tercer cumpleaños”, subtitularon los Príncipes la instantánea junto a un emoticono de corazón.
Gabriel de Suecia, todo un profesional
Alexander y Gabriel de Suecia en el mismo lugar dos años después
Carlos Felipe y Sofia de Suecia abren el álbum de fotos de sus vacaciones privadas
No sólo la edad revela que ya es todo un hombrecito, también la profesionalidad compartiendo con sus padres agenda oficial lo ponía de manifiesto apenas unos días antes. El cumpleaños del príncipe Gabriel, sexto en la línea de sucesión al trono sueco, llega justo después de que participara en un compromiso real acompañado por los príncipes Carlos Felipe y Sofia, pero sin su inseparable hermano mayor, el príncipe Alexander, de 4 años. Era, y fue por tanto, el protagonista absoluto del acto. El pequeño, que es uno de los cinco nietos a los que el rey Carlos Gustavo relegó como miembros de la Familia Real sueca para que pudieran disfrutar en compensación de los privilegios reales perdidos de una vida de mayor libertad, inauguró un área de descanso en la reserva natural de Saterdalen, que se había dedicado en su honor como regalo de bautismo.
“Esperamos que la zona de descanso sea una característica apreciada por los muchos visitantes de esta reserva natural. Definitivamente es un lugar que merece una visita”, comentaron los príncipes Carlos Felipe y Sofia en redes junto a las fotografías de este refugio natural para relajarse. Durante la salida, el primer compromiso oficial que ha realizado en su ducado de Dalarna, el príncipe Gabriel se puso a pintar una pajarera. Pero lo hizo no de cualquier manera. Se puso manos a la obra con la bata de pintor puesta, para evitar que una gota de pintura aventurera aterrizara en la pista equivocada y arruinara su bonito conjunto para la ocasión: un jersey azul de Ralph Lauren, una camisa blanca, unos jeans negros y unas zapatillas blancas.
Al igual que las familias de todo el mundo, la Familia Real sueca viajará menos este año debido a la pandemia que tiene en jaque al planeta. Pero el príncipe Carlos Felipe, su mujer, la princesa Sofia, y sus dos hijos ya han demostrado este verano de coronavirus que no hay por qué ir muy lejos para divertirse. Para celebrar la vida.
