Nuevo hito para la Reina
Este domingo, Isabel II cumple 70 años en el trono y abre los festejos por su Jubileo de Platino, que se desarrollarán a lo largo de este año. La soberana inglesa, que no estaba llamada a serlo, pulveriza su propio récord. Es la monarca inglesa más longeva de la historia y ostenta el cuarto reinado más largo del mundo. Siete décadas llevando la Corona en las que ha sido testigo del devenir de los siglos XX y XXI. Una Reina que subió al trono con apenas 25 años y del que sigue sin intención de bajarse a pesar de ser nonagenaria porque la abdicación nunca ha sido una opción para ella. Ha tenido la oportunidad de conocer a 14 primeros ministros, de recorrer el mundo, de conocer a líderes mundiales, de vivir momentos muy felices para su país y su familia y también otros muy amargos. Es el primer Jubileo que la monarca celebra sin su marido, Felipe de Edimburgo, que falleció en abril de 2021, su gran "fortaleza" en sus propias palabras y con la sombra del juicio del príncipe Andrés, su tercer hijo, por su presunta implicación en el Caso Epstein. La Reina novata que era mirada con recelo y desconfianza ha dado paso a la soberana en la que se fijan todas las monarquías, en todo un referente que traspasa fronteras, en una figura planetaria muy respetada y admirada que supo labrar, sin duda alguna, su propio destino.
La princesa Isabel, a pesar de ser nieta de Reyes, no estaba llamada a ostentar la Corona. La renuncia de su tío, Eduardo VIII, más tarde duque de Windsor, la colocó como heredera. La repentina muerte de su padre, a la edad de 56 años, la hizo abandonar su faceta de mujer recién casada de un oficial de la Royal Navy para asumir un reto extraordinario: el Reinado de Gran Bretaña. Isabel II accedió al trono el 6 de febrero de 1952, el mismo día que murió su padre, Jorge VI, aunque la fastuosa ceremonia de coronación tuvo lugar más de un año después, el 2 de junio de 1953 y fue la primera en ser televisada