Hace casi dos años y medio que Nicolás y Félix de Dinamarca, los hijos mayores del príncipe Joaquín, de 25 y 22 años, respectivamente, dejaron de ser príncipes para ser condes. Una decisión que tomó su abuela, la reina Margarita, quien en 2023 aún era monarca y no había abdicado. Desde que Federico X llegó al trono, lo cierto es que no ha parado de hacer gestos a su hermano menor y a sus sobrinos, dejando claro que en su reinado tienen cabida todos y, de alguna manera, contradiciendo la orden que dio su madre. Ahora, con motivo de su 57 cumpleaños, el monarca danés ha distinguido a sus sobrinos mayores de manera pública.
La Casa Real danesa ha informado que en un acto privado, previo al almuerzo familiar en Amalienborg, con motivo de 57 cumpleaños del monarca, el Rey concedió la Gran Cruz de la Orden de Dannebrog a los condes Nicolás y Félix. Como resultado de su nombramiento, al igual que otros destinatarios daneses de la Gran Cruz, recibirán un escudo personal de caballero. Cuando estos emblemas estén terminados se colgarán en la capilla de los Caballeros del Castillo de Frederiksborg en Hillerod.
En esta ceremonia, el rey Federico también entregó condecoraciones a su secretario privado, el chambelán Morten Roland Hansen, al comandante Lars Jorge Jensen y al secretario privado del príncipe Joaquín y la princesa Marie, consultor especial y secretario de la Fundación Charles-Henri Francois Georges Marie Keller, así como nombró directora jurídica a la jefa de la secretaría del Capítulo de la Orden, Anne Berg Mansfeld-Giese.
En uno de los salones de Palacio, el Rey entregó las distinciones a sus sobrinos, sin la presencia de sus padres y, después, posaron los tres juntos. Nicolás y Félix no salieron este lunes a saludar a los daneses desde el balcón, como es tradición en el día del cumpleaños del Rey porque no pertenecen a la Familia Real. Sí acompañaron al monarca, la reina Mary, tres de sus hijos, los príncipes Isabella, Vincent y Josephine (Christian, el mayor, está en el Ejército) y la reina Margarita.
La decisión que lo cambíó todo
En septiembre de 2022, la reina Margarita de Dinamarca sorprendió con una decisión histórica: sus cuatro nietos, hijos del príncipe Joaquín, dejarían de ostentar los títulos de príncipes y princesa. Nicolás, Félix, Enrique y Athena pasaron a ser reconocidos como condes y condesa de Monpezat, con el tratamiento de excelencia en lugar de alteza real. La monarca justificó esta medida como parte de una necesaria modernización de la institución, destinada a brindar a sus nietos mayor libertad para construir sus propios caminos, sin las ataduras que conlleva una pertenencia formal a la Casa Real.
Esta decisión, alineada con reformas similares emprendidas por otras Casas Reales europeas, no estuvo exenta de controversia. El príncipe Joaquín manifestó públicamente su pesar por la forma en que se comunicó el cambio, y reveló que sus hijos quedaron profundamente desconcertados. Su esposa, la princesa Marie, expresó también su inquietud, especialmente por el impacto emocional en los más pequeños, llegando incluso a relatar situaciones de acoso escolar derivadas del anuncio.