Las familia formada por Mary y Federico de Dinamarca y sus tres hijos siempre ha estado muy unida, aunque no es la más habitual que miembros de la realeza derrochen muestras de afecto en público debido a la institucionalidad de la mayoría de sus apariciones. Sin embargo, con ocasión de la carrera anual Hubertus Hunt en Dyrehaven, al norte de Copenhague, Mary y sus hijos mostraron su lado más cercano y cariñoso y no escatimaron en abrazos. La princesa asitió a la competición hípica con su hijo mayor Christian, que era el que más acaparaba los brazos de su madre, y Josephine, que también reclamaba su dosis de mimos. Buena prueba de lo cercana que es la esposa del príncipe heredero con sus hijos es que no ha dudado en acompañarlos a Suiza cuando inicien su formación en un internado alpino. No te pierdas la faceta más amorosa de los royals daneses en este vídeo.
La inesperada confesión de Federico de Dinamarca sobre su matrimonioPor Amaya Rubio Herreros