DE JULIO CÉSAR A CARLOS V

Por hola.com

La Galia Bélgica, habitada por pueblos celtas e indogermánicos, fue conquistada en el año 57 a. d. C. por Julio César. Un general romano que favoreció la inmigración de tribus germanas a estas regiones y, también, el comercio entre las diferentes zonas del Imperio. En el siglo IV, llega a Bélgica el cristianismo y, en el año 751, la dinastía Carolingia accede al poder con Carlo Magno. Como todo el centro de Europa, Bélgica es por entonces, un territorio feudal... Se suceden las invasiones durante centurias y desembarcan los franceses para instalarse en Bélgica desde el siglo IX al XIV. Surgen, entonces, grandes centros de prosperidad económica y cultural y se establece la casa de Borgoña. Un ducado bajo el que se unifican, por primera vez, la mayor parte de los territorios de los Países Bajos. En este escenario de progreso aparece , en 1515, el emperador Carlos V, hijo de Felipe el Hermoso y doña Juana la Loca y Señor de los Países Bajos. Un monarca que consigue anexionar al gran Imperio de Carlos I de España y V de Alemania, las 17 provincias de los Países Bajos. Con su abdicación, sin embargo -traspasó su poder a su hijo, Felipe II, en 1555-, llegó la decadencia y la rebelión de los nobles contra el dominio español representado por el duque de Alba y su Tribunal de Sangre.