El Presidente ruso, Vladimir Putin, y la diputada Alina Kabaeva desmintieron ayer mismo que fueran a contraer matrimonio próximamente. Estas declaraciones acaban con las especulaciones suscitadas hace pocos días por el periódico moscovita 'Moscow Correspondent', que aseguraba que Putin se divorció hace dos meses de su esposa Lyudimilla para poder casarse, el próximo 15 de junio -un mes después de haber dejado el Gobierno-, con la gimnasta olímpica Alina Kabayeva.
"No hay ni una palabra cierta en todo esto", declaró Putin en una ruda de prensa junto a Silvio Berlusconi. Por su parte, Alina ha amenazado, a través de su representante, con demandar al diario que publicó esta información en el caso de que no la desmienta.
Sólo compañeros de partido Con este desmentido, parece que el mandatario ruso y la ex gimnasta estarán unidos, únicamente, por su amor a la política. Vladimir la nombró diputada junto a tres atletas más y una bailarina del Bolshoi para representar a su partido, 'Rusia Unida'. Celoso de su vida privada, Putin ha roto, por una vez, el silencio impuesto a todo lo concerniente a su intimidad.
El servicio de prensa del Kremlin no había querido confirmar o desmentir hasta ahora este posible "escandalo" amoroso. Tampoco comentar los planes del poderoso Presidente. El mismo hombre que prohibió hace dos años que se hablara de su vida privada y de la de sus dos hijas.
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