Los Príncipes herederos de Japón tienen en Holanda "su segundo hogar"

Por hola.com

Holanda ha abierto sus brazos hospitalarios y los ha extendido hasta Japón. En esta ocasión, la Casa Real holandesa, a través, cómo no, de la reina Beatriz, ha invitado formalmente a los Príncipes Herederos de Japón a pasar sus vacaciones estivales junto a ellos, en el castillo de Apeldoorn, en el este de Holanda. Y éstos, ilusionados, han dicho sí. No en vano, éste es el primer viaje al extranjero que realizan juntos (junto a la pequeña Aiko) desde 2002, cuando visitaron Nueva Zelanda y Australia.

La tristeza de Masako
Desde agosto de 2004, la princesa Masako sufre una depresión que, poco a poco, va superando. Los médicos le han aconsejado que viaje con su familia, lejos de su entorno. Ante esta sugerencia médica, la reina Beatriz de Holanda no dudó en ofrecer su tierra para esta "cura". Y prepararon las maletas, justo los mismos días en que la princesa Kiko ingresó en un hospital de Tokio al surgir algunas complicaciones en su embarazo. Como se recordará, y sin que se haya modificado la ley de la Casa Imperial para permitir el acceso de una mujer al Trono, si la princesa Kiko tiene un varón relegará de la línea de sucesión a la pequeña Aiko.

Unos anfitriones de primera
No se sabrá hasta principios de septiembre qué deparará el destino para el futuro imperial de Japón. Pero, mientras tanto, la vida continúa y el príncipe Naruhito ha valorado muy positivamente el hecho de viajar junto a su familia. La reina Beatriz, así como los Príncipes de Orange, junto con sus pequeñas, se han convertido en esta quincena en unos anfitriones de primera muy pendientes de satisfacer a sus ilustres huéspedes. Y, lo más importante, se ha visto sonreír de nuevo a la princesa Masako.