Aunque durante el embarazo el bebé se mueve, está en un espacio cada vez más reducido y tendrá que esperar a después de su nacimiento para ejercitar su desarrollo motor.
Es un proceso asombroso, donde el pequeño va adquiriendo cada vez más habilidades de forma progresiva y continua. Si un día no era capaz de darse la vuelta, de repente te sorprenderá habiéndose girado. Y así con el resto de momentos que tanto esperas, como su primera sonrisa o sus primeros pasos.
No te lo pierdas
No te lo pierdas
No te lo pierdas
Cómo proteger a tu bebé de los peligros en su primer año de vida
No te lo pierdas
No te lo pierdas
No te lo pierdas
Cómo detectar, cuanto antes, problemas de aprendizaje en tu hijo
No te lo pierdas
Por qué es tan importante que el bebé haga la pinza con los dedos
No te lo pierdas
No te lo pierdas