Los grandes iconos de estilo son habituales de las pasarelas y de los eventos del círculo fashion que tienen lugar en las más importantes capitales de la moda. Sin embargo, algunas celebrities han convertido las fashion weeks en divertidas ‘pasarelas familiares’ en las que presumir de sus adorables pequeños (y no tan pequeños). Las apariciones de hijos de famosos se han multiplicado y cada vez son más las firmas de moda que cuentan con estos pequeños invitados en el público. Su sonrisa y sus originales outfits con toques cool nos enamoran y, a menudo, estas entrañables imágenes se vuelven virales en redes sociales.
Desde que Victoria Beckham se lanzó al mundo del diseño, con la creación de su firma de moda homónima, no hay desfile que se pierdan su marido y sus hijos, a los que siempre podemos ver en primera fila dándolo todo y apoyando a su madre. También nos encanta ver a Neva Portman y Lila Moss, genética indiscutiblemente heredada de sus madres, las icónicas supermodelos Natalia Vodianova y Kate Moss. Neva y Natalia acudieron juntas a un desfile de Christian Dior, y Lila y Kate, a uno de Longchamp. Esta fue la primera aparición pública de la hija de la top británica. Desde ese día, su carrera de éxito como modelo ya estaba escrita y ahora es un rostro habitual de las grandes cabeceras y marcas internacionales.
Las actrices también se suman a esta tendencia. Y hemos podido ver a rostros como Julianne Moore y su hija, Liv Freundlich, en un desfile de Bottega Veneta, o, en la última fashion week de Nueva York, a Sienna Miller con Marlowe Ottoline y a Ellen Pompeo con su pequeña, Sienna May. Un plan madre-hija diferente, pero muy especial.
Los invitados más especiales
La ilusión y la alegría de los pequeños cuando se sientan al lado de sus padres famosos se contagia al resto del ambiente. Para ellos, es un plan increíblemente especial, y sus outfits de lujo siempre están a la altura. Son irresistiblemente chic.