Mujer dando el pecho©AdobeStock

Lactancia

Lactancia y cáncer de mama: ¿son compatibles?

Una de cada 3.000 mujeres pasa por un cáncer de mama o durante el embarazo o en el periodo de lactancia. ¿Cómo influye esta patología en el deseo de dar el pecho al bebé? ¿Es posible? ¿Qué precauciones se deben seguir?

El de mama es el cáncer más frecuente durante el embarazo. Si aparece durante la lactancia se considera “cáncer de mama asociado al embarazo”. Es muy importante saber detectar sus primeras señales y no confiarse en que determinados cambios en el pecho se deben a modificiaciones propias del proceso de lactancia.

En el Día del Cáncer de Mama (19 de octubre) es preciso recordar que cualquier aspecto anómalo del pecho que se mantenga de forma prolongada ha de ser revisado por un especialista, aun durante el embarazo y la lactancia.

Tratamientos contra el cáncer y lactancia materna

En España, la referencia médica para valorar si un tratamiento es compatible o no con la lactancia es www.e-lactancia.org. Se trata de una base de datos contrastada que ofrece información detallada y actualizada sobre fármacos y pruebas médicas y su influencia sobre la lactancia.

Durante el tratamiento del cáncer hay que interrumpir la lactancia debido a los efectos secundarios potencialmente graves para el lactante. “Los tratamientos y procedimientos diagnósticos (antimetabolitos, inhibidores hormonales, radioisótopos) de las enfermedades neoproliferativas contraindican la lactancia mientras están siendo administrados y hasta un tiempo variable después (consultar la ficha de cada tratamiento específico)”, recomienda.

No obstante, en algunos casos, no hay que esperar a la finalización del tratamiento para continuar dando el pecho: “Cuando sea posible hacerlo, las detecciones en leche de cada paciente para determinar la eliminación total del fármaco serían el mejor indicador para reanudar la lactancia entre dos ciclos de quimioterapia”, destacan los expertos de www.e-lactancia.org.

La quimioterapia no afecta a la producción láctea, aunque sí puede alterar de manera transitoria la microbiota de la leche, sin que esto tenga un efecto negativo sobre el niño amamantado.

En todo caso, hay que tener claro que “no es una contraindicación dar el pecho si una mujer ha tenido cáncer de mama y ya no está bajo ningún tratamiento”, como destaca la Dra. Isabel Rubio, directora del Área de Patología Mamaria de la Clínica Universidad de Navarra.

La lactancia sería segura tanto para el niño como para la madre con el pecho afectado y con el pecho sano.

Lazos rosas contra el cáncer de mama©AdobeStock

¿Se puede dar el pecho tras una mastectomía?

Tras el cáncer de mama puede haber distintas soluciones quirúrgicas: una cirugía conservadora o una mastectomía (extirpación del pecho). En la mama sometida a mastectomía, no hay posibilidad de lactancia. Pero sí por la otra (cuando no hay doble mastectomía). Después de la enfermedad es una posibilidad que reconforta a algunas mujeres, pero necesitarán ayuda especializada para instaurar bien la lactancia con un solo pecho.

En algunos casos de cirugía conservadora (la mama no se ha extirpado del todo), puede ser complicado igualmente dar ese pecho. Se podría si se ha dejado el suficiente tejido mamario subcutáneo. Cuando la mama ha estado bajo los efectos de la radioterapia y también en algunas cirugías conservadoras “puede estar disminuido el flujo de leche o no haber en esa mama”, explica la Dra. Rubio.

Se estima que la mitad de las mujeres que han recibido radioterapia en un pecho consiguen producir leche, aunque solo un 25% puede amamantar con él. Además, suele ocurrir que esa leche tenga más cantidad de sodio, por lo que el sabor es diferente y el niño puede rechazarla. No pone en peligro su salud, sino solo puede saberle rara.

En todos estos casos de dificultades, si el deseo de la madre es continuar con la lactancia, es importante que busque ayuda profesional para dar el pecho.

El efecto protector de la lactancia sobre el cáncer de mama

Dar el pecho protege a la madre frente al cáncer de mama y de ovario. Así, la lactancia durante más de 12 meses reduce en un 26% el riesgo de tener un tumor de mama. En el caso del cáncer de ovario, la probabilidad baja hasta en un 34%.

Además, hay estudios que apuntan que el riesgo de recaída en el cáncer de mama es menor si la mujer dio el pecho los seis meses anteriores a su detección.

Por todo ello, los expertos recomiendan que las mujeres que quieran amamantar a sus hijos tras un cáncer de mama sean apoyadas, para poder disfrutar de sus beneficios psicológicos y médicos.

Mujer con lazo rosa por el cáncer de mama©AdobeStock

¿Cuándo buscar el embarazo tras un cáncer de mama?

El cáncer de mama puede aparecer antes de que la mujer haya sido madre y luego madre lactante. Los tiempos a esperar tras la recuperación son importantes.

“Quedarse embarazada y tener hijos después de un cáncer de mama no afecta al pronóstico de estas mujeres, por tanto, no está contraindicado en absoluto. El problema radica en cuándo es el tiempo mejor después de finalizar los tratamientos, para que sea más seguro, y esto no lo conocemos aún. De hecho, hay en marcha un estudio europeo para valorar el impacto que tiene quedarse embarazada en aquellas mujeres que están con tratamiento de hormonoterapia después de un cáncer de mama”, indica la especialista de la Clínica Universidad de Navarra.

 

“Cuando a una mujer le diagnostican de un cáncer de mama y tiene deseos de tener hijos, hay que valorar qué tratamientos va a recibir, ver los tiempos, así como los efectos secundarios”, apunta.

No te lo pierdas: Cuando la gestación es posible a pesar del cáncer de mama

© ¡HOLA! Prohibida la reproducción total o parcial de este reportaje y sus fotografías, aun citando su procedencia.