1/8 © Laura. Foto: Kiss and Chips fotografía

Laura llevaba años almacenando fotos de inspiración nupcial en su teléfono móvil, pero cuando llegó el momento de revisarlas y elegir se dio cuenta de que había un diseño perfecto para ella. "No sabía la firma del vestido y pensé que seria imposible conseguirlo. Así que empecé mi búsqueda entre las firmas de Barcelona, pero no había nada que me convenciera", explica.

2/8 © Laura. Foto: Kiss and Chips fotografía

"Con la idea que siempre había tenido me veía demasiado simple. Sentía que era yo vestida con un vestido blanco en verano y quería verme algo más especial sin dejar de ser yo. Finalmente encontré la firma del vestido que tanto me gustaba y me di cuenta de que me encantaban casi todas las propuestas de la diseñadora, era mi estilo totalmente. Al ver qué era una firma de París, perdí toda esperanza y opté por hacerlo a medida. Pero lo cierto es que me daba mucho miedo el hecho de no ver el vestido hasta el final, así que seguí buscando sobre Rime Arodaky y vi que en el showroom de The Muse Collective tenían prendas de la diseñadora en Barcelona".

3/8 © Laura. Foto: Kiss and Chips fotografía

Finalmente, la novia se decantó por un diseño de colección. Un dos piezas compuesto por una falda de corte sirena de talle alto y un cropped top con tirantes tipo espagueti, elaborado en crepe con tul bordado por encima. Laura nos explica que la única modificación que hizo a la prenda fue añadir más flores en el tul del top. Todo lo demás le encantaba aunque no se pareciera demasiado a su idea inicial.

4/8 © Laura. Foto: Kiss and Chips fotografía

Para completar el estilismo Laura se decantó por unos zapatos de color rosa. Un tono que eligió por dos motivos: es su preferido y "no me gustan los zapatos blancos, los veo demasiado clásicos, y dando el toque de color me sentía más cómoda y más yo. De hecho, toda la boda jugaba con el color rosa, mis damas de honor, la web, las decoraciones, las flores, las mesas…", añade.

5/8 © Laura. Foto: Kiss and Chips fotografía

El mismo tono lo eligió también para su ramo, de estilo silvestre, obra de Ros Barcelona. Otra pista de que no es demasiado clásica la encontramos en el peinado. Aunque cada vez son más las novias que apuestan por dejar la melena suelta, no todas se atreven. Laura sí. La catalana optó por lucir su melena con ondas surferas y recoger los mechones que bordean el rostro para darle un toque más especial. Un peinado diseñado por Marc Lahilla.

6/8 © Laura. Foto: Kiss and Chips fotografía

Lo de organizarla resultó un poco más complicado. Aunque la intención era montar todo ellos solos, finalmente contaron con la ayuda de Claudia, wedding planner de Entre tonos pastel. "Fue nuestro mejor acierto. Consiguieron darnos la tranquilidad que necesitábamos en los últimos meses que son los más estresantes. Y por supuesto, hicieron que nuestro día saliera tal y como esperábamos. El hecho de ese día olvidarte de todo y simplemente céntrate en disfrutar".

7/8 © Laura. Foto: Kiss and Chips fotografía

Se casaban el 31 de agosto y Laura tuvo un accidente de moto justo un mes antes. "Por suerte, y para todo lo que podría haber sido, quedó en "nada". Pero a un mes de la boda no nos ayudó... Estuve 3 semanas sin poder casi moverme, me luxé el hombro y no pude moverlo durante dos semanas, tenia arañada la pierna, pero lo más importante se encontraba en el pie izquierdo. Nos planteamos mover la boda, ya que pasar un día tan especial sentada no era lo que yo tenia pensado…". Pero no fue necesario, y al final todo salió como estaba previsto.

8/8 © Laura. Foto: Kiss and Chips fotografía

¿Lo más especial de aquel día? "No podría decidirme por una sola cosa. Cada momento era especial y único, nunca había sentido emociones tan fuertes como las de aquel día. Pero sin duda, lo que se respiraba en el ambiente, la ilusión, la felicidad y el cariño de toda la gente que nos quiere".

Más sobre: