Pocas novias hay que decidan prescindir de un adorno para su melena. Algunas, con una marcada personalidad, recurren a pamelas, un complemento elegante pero atrevido. Cada vez son más las que recuperan el velo, un elemento muy tradicional que suelen lucir en la ceremonia y retirar para el cóctel. Y muchas las que recurren a tocados, diademas u horquillas para accesorizar su cabello. Las opciones son muchas –cada vez mayores– pero dependiendo del tipo de peinado hay elecciones más favorecedoras que otras.
Melena suelta + diadema
Cada vez son más las novias que apuestan por llevar la melena suelta el día de su boda. Una elección que suele ir acompañada de un peinado con ondas ligeras y sin recargar que aportan un aspecto mucho más cuidado al cabello. En esos casos, el velo no suele ser una opción, por eso muchas chicas recurren a detalles o accesorios con los que completar su look. ¿Los favoritos? Las diademas. Una de las ventajas de este complemento es que pueden ser de distintos colores, formas, materiales y tener los detalles más diversos como podemos comprobar en esta propuesta de cristales de Bo & Luca.