Rod Stewart y Penny Lancaster han despedido estas fiestas navideñas con una intensa preocupación, que finalmente se quedó en un buen susto. La pareja reaccionó con temor cuando su hijo pequeño Alastair se puso enfermo de repente y comenzó a subirle la fiebre. La temperatura del niño no bajaba por lo que, con los nervios reflejados en el rostro, el matrimonio se trasladó a las urgencias del hospital St. Mary, en Palm Beach, Florida. Según fuentes cercanas citadas en algunos medios británicos, el temor del artista y su esposa era que se tratara de una meningitis, aunque los peores presagios no se cumplieron.
Una fuerte infección Tras un examen exhaustivo de más de una hora, se determinó que el pequeño de dos años sufría una fuerte infección en las vías respiratorias y los oídos. Los médicos le recetaron unos antibióticos y enviaron a la familia a casa, donde Alastair continúa su recuperación bajo los cuidados atentos de sus padres. Mucho más tranquila, Penny Lancaster explicó lo ocurrido: "Alastair tenía mucha fiebre así que le llevamos al hospital. Le diagnosticaron una infección y, gracias a la rápida actuación de los doctores, ahora se recupera en casa. Está respondiendo muy bien a los medicamentos".
Rod y Penny viven volcados en el que es el séptimo hijo del cantante (los otros seis, fruto de relaciones anteriores de Steward, son ya mayores) y están planeando darle un hermano o hermana en este año 2008. La modelo y fotógrafa, que contrajo matrimonio con el intérprete el pasado mes de julio, ha confesado en varias ocasiones el deseo que tienen de ser padres de nuevo.
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