Hay canciones que un día escuchamos y entran a formar parte de nuestras vidas, como lo formaron en la de nuestros padres y lo serán en la de nuestros hijos. Melodías que hacemos nuestras convirtiéndolas en clásicos. Una de esas escasas canciones que van más allá de pertenecer a una generación en concreto, para convertirse en banda sonora de la historia reciente de la humanidad es My way.
La versión original pertenece al compositor francés Jacques Revaux. La ideó en 1967 durante unas vacaciones en Suiza y la bautizó bajo el título de Pour Moi. Meses más tarde terminó de darle forma junto al cantante Claude François. Mientras, la letra era escrita por Gilles Thibaut, titulándola al final como Comme d´habitude. Los ingredientes ya estaban, ahora sólo faltaba el condimento que la hiciera mágica.
Paul Anka, durante un viaje a Francia con motivo de una visita a la familia de su esposa, escuchó la canción y no tardó en hacerse con los derechos de la misma. En 1968, Anka le ofreció la versión en inglés a Frank Sinatra cuya carrera musical no pasaba por uno de sus mejores momentos. Pese al éxito que había logrado gracias a Strangers in the Night.
La Voz encontraba su canción y ésta su interpretación más afamada. Después, cientos y cientos de versiones distintas, casi 500, de todo tipo, desde el punk de Sex Pistols al toque personal de Elvis Presley, pasando por las adaptaciones españolas de Julio Iglesias o José Carreras y Plácido Domingo.
Cuando se cumple el 35 aniversario de su composición, se quiere homenajear este tema, jugando con la cifra de su efeméride. Un disco será publicado con 35 versiones del mismo. A su vez, mañana a las 11:50, 35.000 cadenas radiofónicas de todo el mundo, pondrán en antena My way, uniendo bajo su música, países, culturas, a niños y ancianos, a padres y a hijos, porque todos la hemos hecho nuestra.
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