—Acabo de firmar un contrato por cuatro años. Por lo menos cuatro años más tengo que seguir cantando. Eso si no me dicen que me retiran el contrato. Tengo cincuenta y ocho años y estaré hasta los sesenta y dos. Lo que no quiero es seguir cantando hasta los setenta.
—De los escenarios que has pisado por el mundo a lo largo de tu vida, ¿de cuáles guardas un grato recuerdo?
—Del Auditorio Nacional, en México; del Anfiteatro Universal, de Los Angeles; del Teresa Carreño, de Venezuela, pues son teatros que para pisarlos me han costado muchos años y mucho trabajo. Ha hecho falta vender muchos discos, hacer muchas actuaciones para llenar sitios de diez mil personas, y eso lleva un tiempo largo.
—¿Te gusta leer?¿Lees mucho?
—Depende, según me dé. Cuando era más joven leía cosas más dedicadas a los actores, a Stanislawsky, a García Lorca, que me gusta, porque soy muy romántica. Leí a Miguel Hernández, y muchas novelas, y mucha poesía. Sobre todo, me gustan las biografías de gente que le ha pasado algo, no de actores y actrices, sino de gente importante que ha tenido una vida determinada por algo y que te enseña.
—¿Cómo te diviertes cuando tienes tiempo libre?
—Me apaño bien, me gusta la cocina. Por ejemplo, ahora, si tengo algo para cocinar, me lo invento y cocino para mañana.
—¿Qué te hace reír?
—Las películas de Cantinflas, que, por cierto, fue mi amigo. Yo me río como una loca y mis hijos o Antonio me dicen:«Y tú,¿de qué te ríes?»,porque ellos no entienden los chascarrillos que hacen aquí, pues la única que los entiende soy yo, por tanto tiempo de venir, y hasta que le enseñé a mi marido lo que significaban las cosas que quería decir Cantinflas. Ahora él también se parte de risa.
—Antonio, tu marido,¿cómo está?
—Antonio está estupendamente. Lo veré pronto, cuando termine de hacer el vídeo de ‘Carame- lito’ aquí, México. Quiero ir a descansar a Madrid.
—¿Cuánto tiempo descansarás en Madrid?
—Poco tiempo, porque inicio mi temporada con mi mariachi mexicano. Me los llevo a todos a España. Ahora voy a hacer veinte o veintiuna actuaciones hasta el veintiuno de septiembre, y entonces tengo que descansar...,y después regreso a México por Navidades.
—¿Y tu salud, después de esa cirugía que no te permitió ir a las pirámides el año pasado?
—Mi salud está fenomenal, estupenda, diría yo.
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