Britney Spears llegó la madrugada del jueves a Londres rodeada del glamour y los honores propios de una diva. Protegida por unos fornidos guardaespaldas, pendientes de ella en todo momento, la joven aprovechó el día de ayer para realizar unas compras en los lujosos establecimientos de Knightsbridge y dar un paseo por el Hyde Park.
Su estancia en tierras británicas tiene por objeto la promoción de su último sencillo, Overprotected (Sobreprotegida), que entonará en el programa musical de la BBC Top of the Pops. La visita de la cantante a la citada cadena de televisión ha multiplicado el dispositivo de seguridad, que se rumorea va a ser de un nivel sin precedentes. "Ella es una gran estrella y vamos a cuidarla como corresponde", ha declarado una portavoz de la emisora.
El humorista Frank Skinner es el afortunado que entrevistará a la artista, y ha manifestado sentirse "muy emocionado" con la tarea. "La pregunta del millón es si será capaz de arriesgar su carrera y cantar conmigo al final del programa", bromeó el presentador.
Britney, que permanecerá dos días en Londres, ha llegado acompañada de todo un equipo de estilistas, bailarines, peluqueros, maquilladores y asistentes personales. Además de intervenir en Top of the Pops, la cantante tiene concertadas varias entrevistas con distintos medios británicos, y después viajará a Cannes para dar una rueda de prensa donde hablará de sus proyectos más inmediatos.
’Crossroads’, su debut en el cine Días antes de que la superestrella del pop llegara a Reino Unido, había tenido lugar la presentación en Londres de su primera película, Crossroads, en la que Spears da vida a una joven recién graduada que va en busca de su madre.
La cinta, que está siendo rediseñada para incluir nuevas escenas, se estrenará en Estados Unidos el próximo mes de febrero.
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