Esta mañana tiene lugar el último adiós a Constantino de Grecia, último rey del país heleno, que falleció el pasado 10 de enero a los 82 años. Por ese motivo, representantes de todas las casas reales europeas se han dado cita en la Catedral Metropolitana, a cuya entrada han saludado tanto a los presentes y a la prensa. Una vez más, las reinas y princesas han hecho gala de su elegancia atemporal, apostando por diseños sofisticados y sobrios en color negro en señal de respeto, pero no por ello menos estilosos. 

Marie Chantal de Grecia

La mujer de Pablo de Grecia y, por lo tanto, nuera del fallecido Constantino, ha escogido un minimalista vestido de cuello a la caja, manga larga y falda midi recta que agregaba un fino cinturón a juego para potenciar la silueta. Ha destacado su elección de accesorios, de pura tendencia: una diadema ancha y el bolso modelo Nina de Gabriela Hearst, un modelo que adoran las expertas en moda y tiene incluso lista de espera.

Marie Chantal de Grecia

La Princesa ha completado su conjunto con unos pendientes colgantes de perlas y un collar que ha acaparado todas las miradas, compuesto por una larga cadena plateada y una cruz de brillantes.

Olympia de Grecia

Su hija Olympia ha apostado por uno de los vestidos que más triunfa entre la realeza y en Hollywood, un diseño de la firma The Vampires Wife que también tienen, en otro color, Kate Middleton y Beatriz de York. En su caso, ha optado por lucir este diseño, una pieza de cuello a la caja, mana campanada y falda midi acabada en volante, en su versión de terciopelo en protocolario negro. Lo ha combinado con un bolsito de abalorios y salones a juego.

Sassa de Osma

La mujer de Christian de Hannover ha vuelto a hacer gala de su característica elegancia con un dos piezas negro de Dior. Está protagonizado por una chaqueta entallada e ideada para potenciar la cintura al más puro estilo New Look, una pieza con botones forrados y bolsillos frontales a la que ha sumado falda midi de tubo a juego y salones de pulsera al tobillo con tacón bajo. Además, ha completado con el icónico bolsito lady Dior de la casa francesa. 

Mette-Marit de Noruega

La esposa del príncipe Haakon ha elegido un conjunto totalmente sofisitcado y atemporal compuesto por una blazer clásica de silueta recta y una falda midi evasé confeccionada en un tejido ligero. Como las demás asistentes, ha lucido medias negras y salones a juego. Para rematar, ha apostado por el bolsito de mano modelo Knot de Bottega Veneta, un diseño trenzado que también tienen doña Letizia, Carolina de Mónaco y Máxima de Holanda, entre otras royals.

Doña Letizia

La reina de España ha llevado un vestido realizado por las modistas de la Casa Real. Este es en color negro y tiene detalles de terciopelo en la cintura y en los puños. Es igual al verde que llevó en Londres durante el servicio de Acción de Gracias por el duque de Edimburgo. Lo ha complementado con sus salones al tono de Prada y bolso con asa corta de Armani. Como joyas, han destacado sus pendientes con forma de lágrima (que también ha llevado la princesa Leonor) y su broche con la perla Peregrina, una de las joyas de pasar que data del siglo XVI.

Irene Urdangarin

La hija de la infanta Cristina e Iñaki Urdangarin, a la que no es habitual ver en actos públicos, ha llamado la atención por su sofisticado look y su preciosa melena rubia. Para protegerse de las bajas temperaturas, ha optado por un abrigo de paño con cuello solapa y hombros caídos bajo el que llevaba una falda corta. Ha completado con unos salones en piel de tacón ancho y un pequeño bolsito con cadena dorada.

Victoria de Marichalar

La hija menor de la infanta Elena y Jaime de Marichalar ha apostado por un conjunto dos piezas compuesto por una chaqueta con bajo asimétrico y una falda midi plisada confeccionada en un tejido vaporoso. Para darle un toque más juvenil, se ha calzado unos botines de tacón bajo y ancho y ha rematado con un bolso bandolera de Chanel. Además, buscando protegerse del frío, ha llevado un fular de flecos a juego. 

Máxima de Países Bajos

La reina de los holandeses ha decidido desmarcarse del respetuoso dress code que acompañó a todas las invitadas al decantarse por un complemento muy urbano. En concreto, Máxima ha marcado la diferencia al calzarse unas botas de cuero y caña alta. Con ellas, ha complementado un look con un abrigo tipo trench, de doble botonadura y cinturón al tono, que acompañó de un bolso alargado y rectangular con asa corta. En lugar de un tocado, la esposa del rey Guillermo ha optado por cubrir su cabeza con una mantilla de encaje.

Matilde de Bélgica

La reina de los belgas ha optado por un abrigo-vestido con cuello camisero, cinturón ancho incorporado y bajo acampanado confeccionado en un tejido de paño con discreto efecto zigzag. Le ha cedido el protagonismo a los accesorios: un broche de perlas y diamantes en forma de mariposa, pendientes a juego y un tocado tipo pillbox.

Maria Anunciata de Liechtenstein

La Princesa ha escogido un elegante abrigo de pura tendencia, un diseño de paño cruzado con lazada a modo de cinturón, manga abullonada y largo hasta la rodilla. Lo ha lucido sobre un vestido a juego de discreto cuello barco y ha completado con salones de taconazo alto decorados con lazos en la puntera. Para rematar, ha optado por una diadema ancha similar a la de Marie-Chantal y un bolso de mano de Dior.