Los trajes de chaqueta se han convertido en el gran aliado de las royals para cualquier ocasión formal. Siempre impecables, consiguen que esta prenda clásica resulte moderna, elegante y favorecedora. ¿Su secreto? Hombros marcados, cintura entallada y tejidos de calidad que realzan la silueta, entre otras claves. Analizamos los looks más recientes de la reina Letizia, la princesa de Gales y otras royals que dominan el arte de la sastrería a la perfección.
© GTRESHombros marcados
Si hay una tendencia en la que coinciden las royals más elegantes, son las hombreras. Este detalle de los años 80 ha vuelto con fuerza –y para quedarse–, algo que ya adelantaban las pasarelas. Los hombros marcados, ya sean exagerados o más naturales, transforman cualquier básico en una prenda con personalidad, que transmite presencia y elegancia. La reina Letizia lo sabe bien: en sus trajes de chaqueta, las hombreras son imprescindibles. Prueba de ello es el traje burdeos, color en tendencia, que lució durante su visita a la Universidad de Pekín. Aunque el corte es clásico, las hombreras aportan una estructura y construyen una silueta en "V" que estiliza y potencia la figura.
© GTRESCintura de reina
Dejamos a un lado las chaquetas oversize y los cortes rectos para poner el foco en la cintura entallada. Ya sea con una blazer de confección ceñida o añadiendo un cinturón, este detalle transforma cualquier traje en sinónimo de feminidad y poder. Rania de Jordania domina este truco con maestría. En cada aparición pública demuestra cómo equilibrar la elegancia real con la modernidad. Así lo vimos en su total look negro durante su visita a Amman, en noviembre de 2024: una sastrería impecable que resalta su silueta y refuerza su porte majestuoso.
© Getty ImagesTejidos con historia
Si hablamos de trajes de lana, el primer referente inevitable es el mítico tweed de Chanel, símbolo eterno de elegancia femenina. La lana, además forma parte del legado de la sastrería británica, un pilar del estilo real desde hace siglos. Entre las royals británicas, Kate Middleton se mantiene fiel a este clásico. En su visita reciente a RAF Coningsby, Lincolnshire, la princesa apostó por un traje de lana con estampado príncipe de Gales, fiel a su estilo clásico y sofisticado. Una elección que une tradición y autoridad con su elegancia habitual.
© Getty ImagesEl poder del pantalón recto
Si hay un patrón que nunca falla en los trajes de chaqueta de las royals, es el pantalón recto. Este corte clásico eleva cualquier look, aportando elegancia y equilibrio. Aunque las tendencias han jugado con los volúmenes –baggy, wide leg o culotte–, las royals prefieren la atemporalidad de los pantalones de pinzas. Mary de Dinamarca es una fiel defensora de este estilo. Durante su visita al Centro Nacional del Duelo en Copenhague, lució un traje azul marino con pantalones de pinzas, un look impecable que demuestra que la elegancia reside, a menudo, en la sencillez.
© Getty Images"Truco del sándwich"
Combinar la camisa y los zapatos es uno de los tips favoritos de las royals. Se trata del conocido "efecto sándwich": la prenda superior y los zapatos (el "pan") enmarcan la prenda central (el "relleno"), logrando una armonía visual perfecta. Máxima de Holanda domina este juego de contrastes. En uno de sus looks más comentados, durante su visita oficial a Houten, combinó una sudadera negra con pantalón blanco y zapatos en el mismo tono que la prenda superior. El resultado, una mezcla impecable entre modernidad y elegancia clásica, sello indiscutible de su estilo.
© POOL/AFP via Getty ImagesEl largo de americana perfecto
Si hay un detalle que las reinas y princesas no dejan al azar es el largo de la chaqueta. Ese par de centímetros más arriba o más abajo puede transformar por completo la silueta, ya que una americana demasiado corta rompe la elegancia, mientras que una demasiado larga resta modernidad y sofisticación. Es por eso que las royals más estilosas apuestan por chaquetas justo a la altura de la cadera, el punto exacto para crear una línea vertical que estiliza la figura. La princesa Victoria de Suecia domina este truco con precisión y lo ha dejado claro en su look más reciente, durante su visita a Viena. Sus blazers siempre respetan ese largo ideal, logrando ese equilibrio perfecto entre clasicismo y modernidad que tanto define su estilo.
© Getty ImagesEl poder de un look monocromático
Una vez más, Máxima de Holanda nos da una lección de estilo con este recurso infalible para lograr un look impecable sin esfuerzo. Como royal, sabe que apostar por un traje con blusa y accesorios en la misma gama cromática crea un efecto que alarga la silueta, aporta armonía y transmite una elegancia tan serena como poderosa. Además, como ha demostrado en muchas ocasiones, esta técnica permite jugar con los volúmenes y las texturas sin perder cohesión visual. La reina neerlandesa desplegaba todo su magnetismo durante su visita a Utrecht, el pasado 8 de octubre, apostando por un total look azul marino coordinado de la cabeza a los pies.
© Getty ImagesMenos es más en cuanto a los accesorios
En sastrería royal, la elegancia no es algo casual. Las royals saben que un buen traje no necesita accesorios llamativos, basta con piezas sutiles para acompañar el look sin sobrecargarlo. Pendientes pequeños, un broche discreto, o un bolso de mano pueden aportar un toque elegante sin resultar demasiado cargante para el conjunto. La princesa Leonor es un ejemplo de este estilo refinado. En sus actos oficiales apuesta por complementos minimalistas que aportan naturalidad a sus trajes, siempre en armonía con su imagen joven. Así lo demostraba hace unos días, durante la entrega del Toisón de Oro en el Palacio Real, con este traje de sastre rojo que combinó con unos pendientes sencillos, sin collares ni anillos.
