El 'pug', características de una de las razas más populares
Su carácter dulce y cariñoso te conquistará
Cariñoso, dulce, amoroso, fiel, divertido, juguetón, simpático, peculiar, 'rechoncho', perezoso... son tantos los adjetivos que sirven para describir a esta mascota tan popular en nuestros hogares. De hecho, la raza pug o carlino es una de las más solicitadas, por su comportamiento pero también por sus características físicas. Y es que se trata de un perro pequeño que se adapta perfectamente a la vida en la ciudad y a un piso pequeño y que no requiere cuidados especiales, más allá de una buena higiene, dieta, ejercicio moderado y visitas al veterinario para chequear su salud.
El pug, además, es un excelente compañero de niños y ancianos. Es tolerante, paciente y su especial sensibilidad lo convierte en un buen terapeuta si estás pasando por un momento difícil.
Te explicamos cómo es el carlino para que puedas decidir si esta es la raza de perro que quieres adoptar.
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Origen
Pese a que no se sabe con certeza, se piensa que esta raza de perro es originaria de China, donde eran muy famosos en los monasterios tibetanos. Probablemente, los comerciantes holandeses lo introdujeron en Europa, donde fue muy popular entre la realeza. De hecho, la esposa del rey Jorge III de Inglaterra, la reina Carlota, gran aficionada a los perros, poseía varios ejemplares de la raza.
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Características
Es un pequeño pero robusto y fuerte. Lo más característico de su aspecto físico es su hocico chato así como sus ojos saltones y su piel arrugada.
También es muy característica la mancha negra que rodea los ojos del pug, una especie de antifaz que le da más profundidad a su mirada.
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Peso, altura y pelo
La raza carlino, también conocida como pug, no crece mucho. Su peso ronda los 8 kg y la altura a la cruz es de unos 35 cm.
El pelo corto no requiere muchos cuidados. El color suele ser beige o negro.
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Carácter del pug
Su personalidad es una de los motivos por los que se trata de una de las razas más queridas y solicitadas. El pug o carlino destaca por su facilidad de carácter. Es dulce, cariñoso, sociable, muy sensible y muy apegado a sus dueños.
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Alimentación del carlino
La dieta del pug es muy importante, puesto que se trata de una raza de perro con tendencia a engordar. Y la obesidad de esta mascota, que puede ocasionar otros problemas de salud, es frecuentemente debido a una mala alimentación. Lo ideal es que alimentes a tu pug con una dieta comercial seca o húmedad y de calidad y adecuada a su edad (cachorro, adulto o senior). La cantidad dependerá del peso y de la actividad diaria. En caso de que optes como comida casera o deshidratada, consulta antes con el veterinario.
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Salud
Los carlinos pertenecen al grupo de perros que pueden tener problemas para respirar. Esto se debe a su braquicefalia: nariz chata y paladar ancho, blando y laxo, lo que impide que el aire no llegue bien a los pulmones cuando el animal jadea. Por eso, los pug no toleran bien el exceso de ejercicio ni el calor, situaciones que podrían poner en peligro su vida.
En cualquier caso, un carlino bien cuidado y atendido puede llegar a vivir mucho. Su esperanza de vida ronda los 12 años.
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Convivencia
Dado que se trata de un animal muy sociable, juguetón y de carácter afable, la buena convivencia con otros animales está, casi siempre, garantizada. También se lleva muy bien con los niños. De hecho, es una de las razas de pero más recomendadas si hay pequeños en casa.
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Cuidados especiales
Como hemos comentado, los carlinos no toleran ni el ejercicio ni el calor excesivo, pero eso no significa que no deban salir a pasear. De hecho, agradecerán los paseos diarios y un tiempo de juego, siempre en condiciones ambientales óptimas para que no suponga un riesgo para la salud.
En cuanto al cepillado, no suele ser muy exigente, por su pelo corto. No conviene bañarles más de una vez al mes y siempre con un champú especial para perros.
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