Tatiana Santo Domingo & Dana Alikhani, como hermanas
Amigas, socias y compañeras de aventuras, las creadoras de Muzungu Sisters nos descubren los lugares en los que transcurre su vida como ‘working mums’ en los alrededores de Notting Hill, en Londres
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Es fácil pensar, sin conocer a Tatiana Santo Domingo y Dana Alikhani, que llevan una vida de lujo dedicada al dolce far niente. Ambas proceden de conocidas familias, acuden a las fiestas más exclusivas del panorama internacional y Tatiana, casada con Andrea Casiraghi desde hace diez años, es parte de la familia real monegasca. Pero ni una ni otra protestan cuando las citamos a una hora intempestiva para cualquier español. Ambas madrugan a diario para encargarse de sus hijos -tienen tres cada una: Sasha, de 10 años, India, de 8, y Maximiliam, de 5, en el caso de Tatiana; y Aryo, de 9 años, Zand, de 6, y Dara, de 3, en el de Dana- y seguir desarrollando su proyecto en común, la firma de moda ‘viajera’ Muzungu Sisters. También han sacado un hueco para mostrarnos cómo es su vida en Londres.
La cita es en su oficina, en Notting Hill, desde donde las acompañaremos a las direcciones -comercios, museos e incluso el parque donde juegan con sus pequeños- que conforman una vida que, combinada con sus múltiples viajes, hoy inspira sus diseños. Con el frío de la mañana en el cuerpo, nos enseñan dónde se escapan a comer falafel a mediodía o el deli en el que compran sus caprichos, ambos en la cercana Golborne Road, mientras hablan de catarros infantiles y gestionan algunos temas logísticos de la nueva colección. Pronto lanzarán su primera línea de hogar, con manteles y servilletas de lino bordados a mano en distintas partes del mundo por artesanos locales, algo que siempre ha distinguido a su firma, nacida con el objetivo de fomentar el comercio justo y la producción ética y sostenible. No en vano, Dana se especializó en Derechos Humanos y, cada año, ambas donan parte de los beneficios a distintas organizaciones como ACNUR, Choose Love o World Central Kitchen.
“Crecí en Europa y me siento muy europea, aunque siempre he sentido un vínculo muy fuerte con Brasil. Estaba muy unida a mis abuelos maternos, que eran de allí”, Tatiana
-Se cumplen doce años del nacimiento de la firma, ¿cómo ha evolucionado en este tiempo?
-Tatiana Santo Domingo: Lo ha hecho para adaptarse mejor a nuestras vidas actuales como madres de tres niños pequeños. Cuando lanzamos la marca no diseñábamos nuestras prendas ni estampados, básicamente nos abastecíamos de artesanos a los que dábamos pocas especificaciones. Ni Dana ni yo tenemos formación en diseño, y no pretendíamos ser una marca de moda; queríamos ser una plataforma para artesanos de todo el mundo. Pero, al final, buscábamos ropa que pudiéramos llevar en nuestro día a día, para ir al colegio, para la vida en la ciudad...
-Dana Alikhani: Sí, Muzungu Sisters comenzó como un proyecto de estilo de vida. No pretendíamos que se considerase una marca de moda, pero nos fuimos convirtiendo poco a poco en una. A partir de 2018 empezamos a diseñar nuestros propios estampados para completar con prendas propias las piezas clásicas artesanales -mochilas colombianas, chaquetas uzbekas, chales indios...- que forman nuestra colección principal. Hoy seguimos trabajando con más de 23 grupos de artesanos de todo el mundo, desde la India o Italia hasta Colombia, Perú y Uzbekistán.
-¿Cuáles son las técnicas o los artesanos más sorprendentes que os habéis encontrado?
-T.S.D.: Todos los artesanos con los que trabajamos tienen un talento increíble. En Hungría, en el campo cerca de Budapest, trabajamos con una señora muy especial, bordadora de tercera generación. Junto con otras dos mujeres, borda a mano nuestras blusas y vestidos húngaros. Algunas de nuestras prendas de la India llevan bordado chikankari o shadow work. Es el bordado a mano tradicional icónico de la histórica ciudad de Lucknow y las regiones circundantes, una habilidad con más de 200 años de antigüedad que se inspiró en los persas y ha encantado a los indios desde la corte mogol en el siglo XIX. Ligero, precioso y lleno de historia, es un bordado único en su género.
-Viajar siempre ha estado en el ADN de Muzungu Sisters, y he visto que seguís viajando juntas con bastante frecuencia...
-D.A.: Sí, los viajes y la pasión por viajar siempre fueron una parte importante de la marca. La lanzamos viajando para encontrar artesanos únicos, y en los dos primeros años hicimos pop ups en 10 ciudades diferentes. Las dos éramos solteras en aquel momento, aunque ya salíamos con nuestros maridos. Pero cuando nos casamos y empezamos a tener hijos, nuestros viajes se espaciaron… ¡Entre 2013 y 2019, tuvimos seis hijos entre las dos! No nos apetecía dejarlos para viajar tanto, así que nos centramos en trabajar con nuestros artesanos a través del teléfono. Sin embargo, ahora estamos volviendo a viajar para organizar pop ups y buscar nuevos proveedores. Tatiana sigue siendo una de las personas con las que más me gusta viajar, tenemos un ritmo similar, y siempre nos reímos mucho en nuestros viajes.
“Tatiana sigue siendo una de las personas con las que más me gusta viajar. Tenemos un ritmo similar, y siempre nos reímos mucho juntas en nuestros viajes”, Dana
-Ambas habláis varios idiomas, además. ¿Cuáles son vuestras lenguas maternas?
-T.S.D.: El portugués, el francés y el inglés. Me da mucha pena, pero apenas hablo español, aunque mi familia paterna proceda de Colombia.
-D.A.: Las mías, el farsi y el inglés, pero hablo griego con mis amigos de la infancia.
-¿Dónde crecisteis?
-T.S.D.: Crecí en Europa y me siento muy europea, pero siempre he sentido un fuerte vínculo con Brasil. Estaba muy unida a mis abuelos maternos, que eran brasileños y vivían en Suiza, donde viví de niña y pasaba casi todos los fines de semana en su casa. No hay nada que me reconforte más que la comida brasileña.
-D.A.: Yo crecí en Chipre, pero mis padres iraníes me inculcaron una identidad persa muy fuerte y es algo que estoy fomentando en mis hijos, aunque nunca viví en Irán. Hablamos el idioma, comemos la comida y celebramos costumbres tradicionales como nuestro Año Nuevo iraní, Norouz, todos los años.
“Londres conlleva cierto anonimato. Esta es una de las razones por las que me encanta vivir aquí, donde he tenido a mis tres hijos”, Tatiana
-Hoy en día, ¿cómo conciliáis llevar un negocio, viajar y ser madres de tres hijos cada una?
-D. A.: La verdad es que muchas otras madres de todo el mundo se enfrentan cada día a retos mucho más importantes en sus vidas que nosotras. Conciliar nuestro trabajo y nuestras familias es un malabarismo, pero uno feliz, ya que nos gusta estar ocupadas. A veces es complicado, pero tenemos suerte de haber empezado este negocio siendo muy jóvenes, con veintitantos años, porque no sé si hoy tendría la fuerza o la confianza necesarias. Exploramos el mundo y encontramos a nuestros artesanos en 2011. Hoy hubiese sido muy difícil dedicar tanto tiempo a esta aventura. Desde una perspectiva cotidiana, muchos días puedes sentir que lo estás haciendo mal tanto en el trabajo como en la maternidad, pero es genial tener una socia que también es tu mejor amiga y además madre, para animarte, darte algún consejo honesto, o simple perspectiva.
-Tatiana, en tu caso además hay que sumar la atención mediática a tu familia… ¿cómo lo llevas?
-T.S.D.: Por suerte la prensa no nos molesta demasiado. Esta es una de las razones por las que me encanta vivir en Londres, donde nacieron mis tres hijos y he vivido casi todo el tiempo desde los 18, conlleva cierto anonimato.
Sus direcciones
Sus direcciones
Muy cerca de su oficina, en la parte norte de Notting Hill, Dana y Tatiana adoran acudir a Golborde Deli & Wine Store y a Falafel King -según Dana, el mejor falafel de Londres- para comer algo rápido, en ocasiones delante del mismo ordenador, cuando están trabajando.
No muy lejos de su barrio, Holland Park es uno de sus parques preferidos -junto al Sunken Flower Garden en Hyde Park- para pasear y disfrutar en familia cuando tienen tiempo libre.
La antigua casa-estudio del pintor victoriano Frederic Leighton, Leighton House -recientemente reconvertida en museo- es una fuente inagotable de inspiración para ellas cuando no pueden viajar. También las múltiples floristerías de su zona, como Calluna Flower Shop, especialmente en primavera.
FOTOGRAFÍA: ICÍAR CARRASCO
ESTILISMO: CRISTINA PÉREZ-HERNANDO
PRODUCCIÓN Y TEXTO: ESTEFANÍA ASENJO
MAQUILLAJE: VANESSA D’AMBROSSIO
PELUQUERÍA: DANILO (RUUBY)
LOOK 1: AMBAS, CON PRENDAS DE MUZUNGU SISTERS. TATIANA, CON ZAPATOS DE MANOLO BLAHNIK, DANA DE FLABELUS
LOOK 2: VESTIDOS, SANDALIAS Y PULSERA, DE MUZUNGU SISTERS
LOOK 3: CAFTANES, DE MUZUNGU SISTERS
LOOK 4: DANA, CON VESTIDO DE MUZUNGU SISTERS; ZAPATOS DE SVETI STEFAN. TATIANA, CON CONJUNTO DE MUZUNGU SISTERS; ZAPATOS DE FLABELUS. EN LA PÁGINA ANTERIOR: CESTA DE SHICATO PARA MUZUNGU SISTERS
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