Laura Sánchez y su novio, el cantante David Ascanio, quieren ser padres. La modelo y actriz, que ya tiene una hija de siete años fruto de su relación con el futbolista Aitor Ocio, confesó sus ganas de darle un hermanito a Naia durante un evento en Madrid en el que dio consejos sobre cómo llevar una vida saludable. Aunque no se ha marcado un plazo, Laura confesó que quiere repetir la experiencia de la maternidad: "David me ha planteado la idea de tener un hijo y yo le he dicho que sí, que me encantaría. A los dos nos apetece mucho ser padres y creo que ha llegado la hora. Eso sí, para evitar las posibles especulaciones, quiero dejar bien claro que, a día de hoy, no estoy embarazada".
"Naia es hija única y creo que el cariño de hermano siempre es algo muy bonito. Ese cariño es diferente a cualquier otro amor y claro que me gustaría darle hermanos", añadió sobre su niña, a la que define como "encantadora" y "muy deportista". "Intento que sea un personaje propio con pinceladas de su padre y mías", explicó. Respecto a la relación que la pequeña tiene con David, Laura asegura feliz y orgullosa: “¿Qué puedo decirte yo, si soy su madre? Naia es muy buena y cariñosa. Se lleva bien con todo el mundo y adora a David, con quien mantiene una relación preciosa basada en la educación, el respeto y el cariño mutuo. Además, se divierten mucho cuando están juntos y yo con ellos, aunque siempre termino siendo la mala de la película, porque es como si tuviera dos críos en casa.”
Aunque comparte su vida desde hace cinco años con el cantante tinerfeño, del que está cada día más enamorada, la sevillana, de 32 años, asegura que por el momento no se plantean boda. “Primero iremos en busca del bebé y, después, ya veremos. Ahora bien, confieso que no es algo que me haga especial ilusión. Yo soy más de celebrar una fiesta con los amigos algún día que de firmar unos papeles. No creo que sea necesario, aunque eso no significa que un día no me anime a hacerlo”, declaró.
Además, Laura y David forman un tándem perfecto también en el terreno profesional y no dejan de cosechar éxitos con su firma de moda Bloomers & Bikini. "He empezado el año muy liada, con la nueva temporada a punto de salir. Es muy divertida y colorida, pero las partes de arriba van a tener un giro", adelantó. A pesar de que trabajar con tu pareja siempre es un reto, la modelo asegura: "Cuando una empresa la lleva una pareja quiere decir que los dos tienen la misma finalidad. Es verdad que no se puede estar de acuerdo en todo, hay que ceder en algo. Creo que el secreto es que nos lo pasamos muy bien trabajando juntos. Además de ser pareja, querernos y respetarnos, somos muy buenos amigos. Esto ayuda. Hay días que te tienes que llevar el trabajo a casa y es desagradable, por eso intentamos que el trabajo se quede en la oficina y en casa seamos un pareja. Pero lo llevamos muy bien. Si no, no sería posible", y añadió: "Él me dice que tiene el trabajo perfecto, porque por la mañana diseña bañadores y ropa interior para mujeres y por la tarde toca la guitarra, pero la realidad es que le ha tocado el trabajo más feo e ingrato de la empresa, que es el relacionado con la visita a las fábricas y a los distribuidores."
Laura es también creadora de la pasarela We Love Flamenco, cuya segunda edición se está celebrando estos días en Sevilla. “Me gusta actuar. De hecho, el pasado año estrené la película Tres bodas de más, en la que hago un papel, y uno de mis próximo proyectos en la televisión es El chiringuito, serie en la que compartiré reparto, entre otros, con Santi Millán, Jesús Bonilla y Blanca Portillo. Pero no puedo olvidarme de la moda, que ha formado parte de mí durante estos últimos dieciséis años. Lo que me importa es seguir aprendiendo y crecer profesionalmente, sea en el mundo de la interpretación o en el de la moda”, asegura Laura, que próximamente recogerá el premio 'Flamenca con Arte': “Cuando me comunicaron que me habían premiado, me hizo mucha gracias, porque es cierto que soy bastante flamenca, pero lo que no tengo es arte”.
La 'top' andaluza también habló de la importancia de adoptar hábitos saludables, sobre todo cuando se tiene una vida profesional tan ajetreada y se vive a caballo entre dos ciudades, como le sucede a ella, que desde hace seis años se divide entre Madrid y Bilbao para estar con su hija: "Tengo que aprender a cuidar más mis hábitos alimenticios, porque me encanta comer. Cada vez más. Además, soy muy cocinillas. Pero, aunque al principio puede costar un poco, si te mentalizas y vas repitiendo conductas saludables, finalmente se convierten en hábitos que forman parte de tu vida, entre ellos comer de forma equilibrada, hacer un poco de ejercicio, llevar una vida activa e incluir fibras y cereales en la dieta. Yo, por ejemplo, he cambiado el pan, que hacía en casa, y otros alimentos por las barritas energéticas. Lo que no pruebo nunca son los dulces. No me gustan. Me sobra con mi novio, que es un 'bombón' y ya me endulza la vida a diario."
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