Perder grasa visceral, por ejemplo, la abdominal no solo es un objetivo estético. También es una buena decisión para mejorar nuestra salud. Sin embargo, cuando nos adelgazar y perder grasa podemos dejarnos guiar por mitos o falsas creencias que pueden impedir que logremos nuestro objetivo. Por ello, antes de ponernos a dieta para adelgazar, lo ideal es que consultemos con un nutricionista.
El equipo de nutricionistas de Germaine Goya, nos explican cuáles son los mitos en torno a perder la grasa general y la localizada y cuáles deben ser los ejercicios, la dieta y los trucos que mejor nos ayudan a quemar grasa.
- ¿Por qué nos cuesta tanto eliminar la grasa que nos sobra?
Los carbohidratos engordan y se convierten en grasa
Esta es una de los mitos más comunes a la hora de perder peso o quemar grasa. Pero la realidad es que no hay alimentos buenos o malos. Sin embargo, debes tener precaución con los alimentos ultraprocesados o aquellos con azúcares añadidos, ya que su consumo a largo plazo está relacionado con enfermedades cardiovasculares y diabetes. Por lo tanto, es recomendable consumir carbohidratos, pero optar por opciones saludables como cereales integrales, como el pan, la pasta o el arroz.
Para perder grasa hay que saltarse comidas
Es un mito completamente falso. Aunque haya personas a las que les funcione el ayuno intermitente, en realidad, nuestro organismo necesita una determinada cantidad de calorías para poder desarrollar las actividades diarias. Al eliminar comidas sin criterio podemos hacer que el cuerpo absorba las calorías de otros alimentos y engordemos más.
Para perder grasa, hay que tomar alimentos quemagrasa
Nada más lejos de la realidad, ya que no hay alimentos que, por sí solos actúen como 'quemagrasa', y hagan el milagro de eliminar la grasa que acumulas en tu organismo. Si fuera así, nos libraríamos todos de la grasa corporal en poco tiempo, ¿no? Lo que tienes que tener en cuenta es regular los alimentos que consumes, las calorías que ingieres en función de la actividad física que realizas.
No comer pan me ayudará a no engordar y a quemar más grasa
Es otro mito. El pan es uno de esos alimentos que nos quitamos cuando queremos perder peso y quemar grasa visceral. Sin embargo, este alimento no es el responsable de que engordes. Eso sí, siempre lo más natural posible. Prescinde hechos con harinas refinadas y, en general, todos aquellos que contengan sal, azúcares y otros ingredientes que se alejen de lo que es un pan hecho con harina integral, agua, un poco de sal y fermento... es decir, todos los ultraprocesados.
- Por qué es importante incluir los carbohidratos en tu dieta
Para perder grasa abdominal, basta con hacer abdominales
Realizar abs en exclusiva no ayuda a eliminar la grasa de la zona del abdomen. Debes combinar rutinas de ejercicio de cuerpo completo y de alta intensidad, ya que de esta forma se estimula la perdida de grasa en todas las zonas, con ejercicios centrados en el core, ya que ayudaran a estimular la zona del abdomen. Llevar una dieta equilibrada en la que no haya déficit ni exceso calórico también será fundamental.
La grasa hay que evitarla porque es mala
No, eso no es correcto. Hay grasas buenas y también hay grasas malas. La grasa, de hecho, desempeña un papel fundamental en el funcionamiento adecuado de nuestro cuerpo. Lo que sucede es que hay productos que contienen grasas trans que son perjudiciales. Por lo tanto, en una dieta saludable, es posible incluir grasas saludables como el aceite de oliva, frutos secos, aguacate, y otros.
Si no ceno quemaré más grasa
Es otro de los errores más comunes. Muchas personas creen que dejar de cenar puede hacerles adelgazar. Y es cierto que se aconseja cenar más temprano y que esta comida sea más ligera, pero lo verdaderamente relevante son las calorías. Lo que importa es la cantidad que comes y el ejercicio que haces para que haya un déficit calórico.
Pierde grasa haciendo pequeños cambios
En definitiva, el primer consejo saludable si quieres adelgazar y perder la grasa que te sobra sin caer en mitos ni poner en riesgo tu salud es acudir a un nutricionista para que te enseñe a comer bien. A veces solo es cuestión de hacer pequeños cambios, como indica Noelia Suárez, de Nutritienda.com. Por ejemplo:
- Huir de los alimentos ultraprocesados, conocidos por sus altas cantidades de azúcares refinados, grasas saturadas y su pobre calidad nutricional, ya que no aportan vitaminas y minerales
- Evitar los refrescos con azúcares y los bollos industriales, que, sin duda, empeorarán nuestra composición corporal.
- Evitar los cereales azucarados del desayuno y cambiarlos por copos de avena finos o por tostadas de pan de centeno o 100 % integral con aguacate.
- Cambiar el cacao con azúcar por cacao puro.
- Sustituir la crema de avellanas con azúcares añadidos, por cremas de frutos secos naturales.
- Cambiar las galletas ultra procesadas por un puñado de frutos secos (pistachos, avellanas, nueces).
- Cambiar las chocolatinas por 1 onza de chocolate negro al 80 %.
- Sustituir los refrescos azucarados por bebidas sin azúcar, infusiones, batidos de frutas, macedonias naturales.