Cabeza hacia abajo
Es un ejercicio muy simple que puedes realizar, incluso, sentada en la cama antes de comenzar el día. Consiste en mantener la espalda recta y bajar la cabeza intentando tocar el pecho con el mentón. Sube y baja, muy suavemente, esto ayuda a desbloquear las cervicales. También puedes sumarle movimientos de rotación, siempre de manera lenta y controlada, alternando hacia un lado y el otro. Controla que los hombros no sigan el movimiento de la cabeza sino que permanezcan en paralelo entre si.
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