6 consejos para relacionarte mejor con personas inflexibles

Sus características psicológicas, su pensamiento rígido y su actitud casi inmovilista hace que las relaciones con ellas sean muy difíciles. Ellas no van a cambiar, pero tú sí puedes aprender a lidiar con este tipo de personalidad

Por Nuria Safont

"Tercas, cabezonas, de mente cerrada… estos adjetivos describen perfectamente cómo son las personas inflexibles”, explica la psicóloga Pilar Guerra Escudero, este tipo de individuos son personas que muestran una resistencia al cambio, tienen dificultad para adaptarse a nuevas situaciones o ideas, y tienden a mantener posturas rígidas en sus pensamientos y comportamientos. Son reacias a la ambigüedad y les cuesta explorar nuevas perspectivas, ideas y enfoques diferentes a los suyos. “Se aferran a la creencia de que su verdad es la única, o al menos la más valiosa, y rechazan cualquier punto de vista que desafíe sus convicciones arraigadas. Son inmunes al cambio, especialmente, cuando se trata de cuestionar sus creencias y estereotipos”, indica la psicóloga.

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¿Cómo se forma este tipo de personalidad?

La formación de la personalidad inflexible puede ser resultado de diversos factores. Algunas personas pueden haber desarrollado esta actitud como una forma de protección ante situaciones difíciles o estresantes en el pasado. También puede ser influencia de la educación recibida, donde se fomenta la rigidez y se desalienta la flexibilidad. Asimismo, las experiencias negativas repetidas pueden llevar a una actitud defensiva y apegada a lo conocido. En general, la personalidad inflexible es el resultado de una combinación de factores psicológicos, emocionales y ambientales que moldean la forma en que una persona se relaciona con el mundo y los demás.

“Dentro de las causas que forman este tipo de personalidad está el que utilizan un lenguaje interno en forma de pensamiento rígido, creencias limitantes, distorsiones cognitivas e ideas irracionales, lo que lleva a que sus emociones y conductas tengan también atisbos de inflexibilidad y muy poca permeabilidad”, argumenta la facultativa.

Test de personalidad inflexible

 

¿Cómo podemos lidiar con ellas?

Ya lo dijo Einstein: “la mente que se abre a una nueva idea, jamás volverá a tu tamaño original”. Sin embargo, abrir la mente es un ejercicio complicado y lidiar con personas inflexibles puede ser un desafío. Es complicado convivir con ellas, sobre todo, porque se aferran tanto a su punto de vista y se cierran tanto a escuchar y comprender las opiniones ajenas que interactuar con ellas es sumamente difícil. Sin embargo, para Pilar Guerra Escudero, lo más importante es mantener la calma y evitar reaccionar de manera impulsiva. Y, para ello, lo mejor es buscar puntos en común y tratar de encontrar soluciones o alternativas que satisfagan ambas partes.

También es esencial ser claro y directo en la comunicación con ellos, pero evitando confrontaciones innecesarias. Y, por supuesto, tener mucha paciencia y, sobre todo, empatía al tratar de comprender las razones detrás de su rigidez. Otra vía es ofrecerles opciones limitadas para permitirles sentir que tienen cierto control y poder de decisión.

Aun así, para Guerra Escudero, lidiar con ellos va a estar relacionado con tener un nivel de expectativa realista, ya que no es fácil enseñar a alguien la evidencia de que su personalidad es impermeable. Tampoco hemos de hacernos cargo de enseñar a los adultos inflexibles; en ocasiones es mejor herramienta es la de dejar que aprendan de las consecuencias negativas de su tendencia.

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¿Qué estrategias se pueden emplear para mantener la calma al interactuar con personas inflexibles?

Mantener la calma al interactuar con personas inflexibles puede ser un desafío, pero para ello la psicóloga Guerra Escudero apunta algunas estrategias:

  1. Practicar la empatía. Intentar comprender su perspectiva y emociones sin juzgar. Esto ayudará a establecer un puente de comunicación más efectivo.
  2. Ser asertivo. Expresar las ideas y puntos de vista de manera clara y respetuosa. Mantener la calma y evita caer en discusiones acaloradas.
  3. Fomentar el diálogo abierto. Invitar a la persona inflexible a compartir sus pensamientos y escucharlos atentamente, demostrando interés genuino por entender su posición.
  4. Evitar confrontaciones directas. En lugar de atacar sus creencias, es mejor enfocarse en resaltar las áreas de acuerdo y buscar puntos en común. Esto puede ayudar a reducir la resistencia defensiva.
  5. Ofrecer información adicional. Proporcionar datos, hechos y evidencia que respalden nuestros argumentos puede ayudar a desafiar las creencias inflexibles y abrir la mente a nuevas perspectivas.
  6. Ser paciente y persistente. Cambiar la mentalidad inflexible lleva tiempo. No hay que desanimarse fácilmente y continuar promoviendo un diálogo constructivo y respetuoso.

 

¿Cuál es el papel de la empatía?

Para Pilar Guerra Escudero, la empatía juega un papel fundamental al tratar con personas inflexibles. Ponerse en el lugar de la otra persona y tratar de comprender sus pensamientos, sentimientos y experiencias puede ayudar a establecer una conexión más genuina. La empatía puede facilitar la comunicación y abrir la puerta a una mayor comprensión mutua. “Al mostrar empatía, también se puede reducir la hostilidad y fomentar un ambiente más propicio para encontrar soluciones”, puntualiza.

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¿Qué técnicas de comunicación son útiles al tratar con personas difíciles?

Para tratar con personas difíciles, Pilar Guerra Escudero destaca varias técnicas de comunicación efectivas:

  • Ser claro y directo, evitando ambigüedades.
  • Utilizar un tono de voz tranquilo y respetuoso.
  • Escuchar activamente y mostrar interés en lo que la otra persona tiene que decir.
  • Reformular y repetir lo que la persona dice para asegurarte de que has entendido correctamente.
  • Evitar el lenguaje acusatorio o agresivo y, en su lugar, utilizar un enfoque asertivo.

¿Cómo se puede establecer límites adecuados al relacionarse?

Establecer límites es fundamental para mantener el equilibrio y el respeto mutuo. Para ello, la psicóloga indica que lo primero de todo es ser consciente de nuestras propias necesidades y prioridades. A partir de ahí, se deben comunicar claramente los límites de manera asertiva y respetuosa, manteniendo una postura firme y coherente al hacer cumplir estos límites. También es importante evitar la culpa o disculparse por establecer límites y estar dispuesto a negociar cuando sea posible, pero sin comprometer nuestras propias necesidades.

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¿Cuáles son algunos consejos para mantener una postura positiva y constructiva al lidiar con este tipo de personas?

Además de armarnos de paciencia, para mantener una postura positiva y constructiva al lidiar con personas inflexibles es fundamental enfocarnos en lo que podemos controlar, es decir, nuestras propias reacciones y actitudes. Además, es importante buscar el aspecto positivo en la situación o en la persona, aunque sea pequeño y, sobre todo, mantener la mente abierta y dispuesta a considerar diferentes perspectivas.

En los posibles conflictos, buscar soluciones creativas y flexibles es lo más recomendable, en lugar de aferrarnos a una única opción.

“En definitiva, hay que grabarse a fuego que no podemos cambiar a la otra persona, pero sí podemos controlar cómo reaccionamos nosotros ante su inflexibilidad”, concluye Guerra Escudero.

¿Qué estrategias se pueden utilizar para evitar involucrarse en conflictos?

Para evitar conflictos con personas inflexibles, la psicóloga recomienda estas estrategias:

  • Elegir las batallas que queremos luchar sabiamente y decidir cuándo es necesario involucrarnos o cuándo es mejor dejarlo pasar.
  • Mantener la calma y no permitir que los comentarios o actitudes desencadenen una reacción impulsiva.
  • Evitar el lenguaje agresivo y, en su lugar, utilizar un enfoque respetuoso y asertivo.
  • Establecer límites claros, comunicándolos de manera firme, pero respetuosa.
  • Si es necesario, otra opción es buscar la mediación de un tercero imparcial para ayudar a facilitar la comunicación y resolver conflictos.