Cómo afecta el ejercicio físico a tu piel

No cabe duda de que el deporte es muy beneficioso para nuestra salud, pero, como todo, también tiene su cara B. Al realizar ejercicio -todavía más si este es al aire libre, como el running-, la piel se expone a las inclemencias meteorológicas: sol, aire, bajas temperaturas, contaminación… Por ello, no está de más recordar cómo los factores externos afectan a nuestra piel y qué cuidados se recomiendan para evitar la deshidratación y los radicales libres.

Cuidados faciales para deportistas


Evita el estrés oxidativo

En caso de practicar running, un deporte puramente aeróbico, donde existe un consumo de oxígeno alto, debes tener en cuenta que se acelera la oxidación de la piel, se pierde hidratación y nuestras células se ven atacadas por los radicales libres –responsables del envejecimiento-. Es lo que científicamente se conoce como estrés oxidativo. De ahí la importancia de que los expertos en actividad física recomienden correr a un ritmo moderado dos o tres veces por semana y combinarlo el resto de días con otros ejercicios que no suponga el esfuerzo y el impacto de la carrera en nuestros huesos y articulaciones. Además, nos ayudará una rutina de belleza rica en Vitamina C, A, E y betacaroteno, sin olvidarnos del factor de protección solar y llevar una dieta saludable con presencia de alimentos antioxidantes –frutos rojos, verdura de hoja verde, colíferas y cítricos-. Incluso, en algunos casos podría recomendarse complementos nutricionales de colágeno.

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Cuidado con la pérdida de grasa en el rostro

La pérdida de grasa en el rostro es otro de los inconvenientes estéticos relacionados con deportes aeróbicos. Por ejemplo, correr grandes distancias cada día hará que nuestro consumo energético se vea sustancialmente incrementado y, con ello, también el de grasas. Por ello, cuando la grasa se consume a nivel facial, observamos cómo va perdiendo volumen la zona de los pómulos, la zona periocular (alrededor de los ojos)… Esto hará que comiencen a aparecer arrugas, como el surco nasogeniano, y las ojeras y las patas de gallo se hagan mucho más visibles. En este sentido, las cremas con fórmulas a base de ácido hialurónico y vitaminas nos vendrán muy bien; incluso, podemos recurrir a los rellenos de ácido hialurónico si queremos reestablecer los volúmenes perdidos, tal y como indican los expertos de la Clínica Vieira.


Deporte y descolgamiento facial

A lo anterior, se suma la flacidez provocada por el movimiento de impacto repetido contra el suelo que destensa los músculos del rostro. Por ello, según los expertos de la clínica de belleza Slow Life House, es recomendable hidratar a fondo no solo la piel del rostro, también cuello y escote.

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