Puede que nunca hayas pensado que necesitas una hidrolimpiadora en casa, pero cuando descubras todas sus funciones y lo mucho que te facilitará la vida no podrás prescindir de ella. Hoy te contamos cómo funcionan estos prácticos aparatos y cuál es el mejor para ti.

La limpieza más eficiente y rápida

Si vives en una casa con jardín y zonas de exterior ya sabrás que, además de todas las ventajas que implica, también conlleva un incremento de las tareas de limpieza y mantenimiento. Las superficies que se encuentran a la intemperie acumulan mucho polvo y suciedad, por lo que es necesario limpiarlas con frecuencia.

Si dejamos pasar mucho tiempo, la suciedad se incrusta y es mucho más difícil de eliminar. Y aquí es donde entra en escena la hidrolimpiadora, una máquina que expulsa agua a alta presión para limpiar todas esas superficies.

A la hora de elegirla es importante saber qué uso le vas a dar, ya que no todo se limpia igual y las necesidades no son siempre las mismas.

Leer: Pon a punto las zonas de exterior de tu casa y prepárate a disfrutar del buen tiempo

¿Cómo funciona una hidrolimpiadora?

La máquina se conecta mediante una manguera al grifo del agua. La bomba que lleva la hidrolimpiadora en el interior genera una alta presión (de hasta 160 bares) y lanza el agua de forma que arrastra la suciedad de cualquier superficie.

La distancia a la que utilicemos la máquina también determina su poder de limpieza: si la suciedad está muy incrustada, colocaremos la lanza de la hidrolimpiadora más cerca. La bomba de la hidrolimpiadora cuenta con un regulador que te ayuda a controlar la presión de salida del agua para que siempre sea la adecuada (no en todos los casos necesitas la misma fuerza).

Leer: Estas son las herramientas de jardín que no te pueden faltar

El caudal de agua también importa

Está claro que si queremos arrancar la suciedad de una superficie, la presión que genere nuestra hidrolimpiadora es lo que nos ha de importar. Sin embargo, para otros trabajos de mantenimiento como limpiar el suelo de la terraza o la fachada de la casa, el caudal de agua que se produzca también es importante. Para que este sea el adecuado es necesario que la manguera tenga un grosor de 20 mm como mínimo.

Leer: ¿Sabes cómo limpiar tus suelos de ladrillo de exterior?

Elige el modelo en función del uso

A la hora de elegir la hidrolimpiadora adecuada para ti es fundamental pensar en el uso que le vas a dar. Una máquina cono esta se puede emplear para muchas tareas: sirve para limpiar, pero también para desatascar tuberías, para pulverizar productos fitosanitarios en tu jardín, para limpiar grandes superficies como la piscina, o para decapar una superficie retirando la pintura vieja (se utiliza con un kit de decapado que mezcla el agua con arena).

Según la frecuencia con la que vayas a usarla te convendrá elegir un tipo u otro, con más o menos presión.

- Si la vas a emplear de forma ocasional, para limpiar bicicletas, maquinaria de jardín, muebles de exterior, etc., bastará con una hidrolimpiadora que funcione con una presión de entre 100 y 110 bares.

- Si el uso va a ser moderado, y vas a limpiar coches, paredes y suelos de exterior de tamaño medio, entonces has de elegir una máquina de entre 110 y 120 bares de presión.

- Para un uso frecuente, que englobe la limpieza de fachadas, piscinas, pavimentos de grandes superficies, entonces mejor optar por una máquina de hasta 160 bares.

Leer: En qué debes fijarte para elegir el mejor limpiafondos para tu piscina

¿Con motor eléctrico o de gasolina?

Aunque pueda parecer una máquina sencilla, la hidrolimpiadora se compone de diversos elementos que debes conocer para poder elegir la que mejor se adapte a tus necesidades.

- La bomba es el elemento decisivo. Cuenta con un cabezal para conectar la manguera con la entrada de agua, que pude ser de aluminio, acero o latón. Es la bomba, junto con el motor, la que genera la presión a la que se expulsa el agua.

- Motor: de diferentes potencias (entre 1.300 y 3.000 w). Puede ser eléctrico, de batería o de gasolina. Los eléctricos han de conectarse a una toma de corriente, y los de batería son para máquinas ligeras y con menores prestaciones. Los más potentes y con mayor autonomía son los de gasolina, que suelen emplearse para uso profesional.

Leer: ¿Merece la pena comprar un robot aspirador?

Otros componentes de la hidrolimpiadora

Además del motor y de la bomba de presión, las hidrolimpiadoras cuentan también con otros elementos que debes tener en cuenta:

- Filtro: está colocado en la entrada de agua de la máquina. Sirve para evitar que se introduzcan impurezas en el interior de la hidrolimpiadora, lo que podría ocasionar averías. Tendrás que limpiarlo cada cierto tiempo con ayuda de un cepillo.

- Manguera de alta presión: las hay de diferentes longitudes entre 2 y 12 metros. Las hidrolimpiadoras de alta gama suelen llevar mangueras bastante largas reforzadas con malla metálica para lograr que sean más resistentes y duraderas. Conviene que la máquina incorpore un sistema para enrollar la manguera y guardarla de forma más práctica. 

- Pistola de alta presión

- Lanza pulverizadora

- Boquillas de diferentes forma y tamaño para conseguir distintos tipos de chorro.

- Accesorios para distintas funciones: cepillos, pistolas, etc.

- Ruedas para un desplazamiento cómodo y rápido.

Leer: Todas las ventajas de limpiar tu casa con la vaporeta

No solo agua

La mayoría de las hidrolimpiadoras cuentan con un depósito para poner el detergente, cuando sea necesario utilizarlo. Además se puede cargar con limpiadores específicos, fungicidas, etc.

Siempre hay que tomar la precaución de asegurarse de que se trata de productos de uso compatible con hidrolimpiadoras, ya que si son corrosivos podrían estropear la máquina.

Algunas hidrolimpiadoras pueden utilizar agua caliente, además de la fría, con lo que mejorar todavía más su capacidad de limpieza.

Cuando termines el trabajo, es importante vaciar completamente la manguera para que no quede agua ni otros líquidos en el interior.

Leer: Elige los mejores fertilizantes para tus plantas y revitaliza tu jardín

Apuesta por el ahorro

Además de conseguir una limpieza profunda y completa y facilitar las tareas de mantenimiento del exterior de tu casa, la hidrolimpiadora tiene otras ventanas. Una de las más importantes es el ahorro que consigue en cuanto a agua y detergentes.

Su consumo de agua puede llegar a ser de hasta ocho veces menos que el de una manguera. Gracias a la alta presión que genera, con muy poca cantidad de agua se consiguen unos resultados de limpieza espectaculares.

Leer: Descubre algunas de las mentiras más frecuentes sobre la limpieza doméstica

Consejos para mantenerla en perfecto estado

Si quieres cuidar tu hidrolimpiadora para alargar en lo posible su vida útil, es importante utilizarla correctamente, además de hacer un buen mantenimiento.

- Para empezar debes controlar el tiempo de funcionamiento de la máquina y no sobrepasarlo para no recalentar demasiado el motor.

- Acostúmbrate a cebar correctamente la máquina con agua antes de enchufarla (atiende a las instrucciones de funcionamiento del fabricante).

- Al acabar, vacía completamente la máquina y la manguera.

- Aclara con agua los conectores de la manguera y engrasa las gomas que llevan de vez en cuando.

- Mantén las boquillas siempre limpias y elimina los restos de cal o suciedad que se puedan acumular en ellas.

Leer: Cómo limpiar las persianas de casa de forma práctica y efectiva