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Pudin de pan con helado de vainilla y nueces pecanas


75 min
fácil
pudin pan adobe© Adobe Stock

Este es uno de esos postres clásicos para aprovechar el pan del día anterior, aunque también lo puedes hacer con restos de bollos, magdalenas, cruasanes y otros. Es como una especie de flan con esas sobras y caramelo que, en este caso, acompañamos con helado de vainilla -o cualquier otro que tengas en el congelador- y nueces pecanas -u otros frutos secos-. ¡Un postre clásico que a nosotros, particularmente, nos encanta!

Ingredientes

  • 4 unidades de huevo
  • 600 mililitros de leche
  • 100 gramos de azúcar blanca
  • 1 cucharadita de extracto de vainilla
  • 1 unidad de canela en rama
  • sobras de pan o de bollos
Para el caramelo
  • 8 cucharadas de azúcar blanca
  • 100 mililitros de agua
  • helado de vainilla
  • nueces pecanas
  • azúcar glas

Preparación

Echa en un cazo la leche junto con la rama de canela, el azúcar y el extracto de vainilla.
Pon al fuego y calienta hasta que empiece a humear sin llegar a hervir. Retira del fuego y deja reposar unos minutos para que se aromatice.
Desmiga el pan o los restos de bollos y colócalos en un cuenco grande.
Vierte la leche caliente (sin la canela) sobre el pan y deja que se empape durante unos 10 minutos.
Bate los huevos en otro recipiente y agrégalos a la mezcla de pan y leche.
Remueve bien hasta obtener una preparación homogénea. Si prefieres una textura más fina, puedes triturarla ligeramente con batidora.
Prepara el caramelo poniendo el azúcar y el agua en un cazo limpio a fuego medio.
Deja que se derrita sin remover hasta que tome un color dorado ámbar. En ese momento, mueve suavemente el cazo en círculos para igualar el color y retira del fuego.
Vierte el caramelo en un molde rectangular y extiéndelo por el fondo y las paredes antes de que se enfríe.
Precalienta el horno a 180 °C.
Echa la mezcla de pan, leche y huevos en el molde acaramelado.
Coloca el molde dentro de una bandeja de horno con agua caliente para hacer un baño maría.
Introduce en el horno y hornea durante unos 40–45 minutos, hasta que el pudin esté cuajado pero todavía jugoso en el centro.
Saca con cuidado del horno, deja templar y luego refrigera al menos un par de horas antes de desmoldar.
Corta el pudin en porciones y sírvelo acompañado de una bola de helado de vainilla y unas nueces pecanas.
Espolvorea por encima un poco de azúcar glas antes de servir.

© ¡HOLA! Prohibida la reproducción total o parcial de este reportaje y sus fotografías, aun citando su procedencia.