Después de que Charlie Sheen fuera detenido por violencia doméstica el pasado día de Navidad, el matrimonio del actor y su esposa, Brooke Mueller,ha llegado a su fin. A pesar de que después del incidente intentaron reconciliarse por el bien de sus hijos mellizos Bob y Max, de un año, la pareja ya ha firmado los papeles de divorcio citando "diferencias irreconciliables".
La mujer de Charlie Sheen recibirá una pensión de 55.000 dólares al mes (45.000 euros aproximadamente) para el cuidado de sus hijos y el actor que vivirá en el hogar conyugal tendrá que comprarle otra valorada en un millón de dólares (800.000 euros) a la madre de sus hijos. Brooke Mueller, que ha estado en rehabilitación varias veces, ha vuelto a ingresar para someterse a un nuevo tratamiento, pero al parecer será ella quien obtenga la custodia de sus hijos, mientras Charlie podrá ir a visitarles los fines de semana. Sheen tiene también dos hijas con Denise Richards, Sam y Lola, y otra más mayor, Paula Profit. En el acuerdo firmado ante los tribunales aparece contemplado que ninguno de los dos hablara mal de otro en presencia de sus hijos.
A la espera de que se conozca el veredicto el 12 de julio, el actor mejor pagado de la televisión por Dos hombres y medio sigue siendo un hombre libre. El tribunal de Aspen decidió posponer la sentencia por un delito de violencia doméstica por parte de Charlie Sheen. Al parecer, el propio actor habría accedido a declararse culpable de los cargos y cumplir 30 días en prisión en régimen de tercer grado, lo que le permitiría salir de la cárcel para trabajar en un teatro y la condena podría quedar reducida a quince días por buena conducta.
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